La castaña china, una amenaza crítica para el sector zamorano

Castañas
Santiago Pereira, experto nacional en castañicultura, advierte en Trabazos sobre el impacto de este producto foráneo en un mercado ya debilitado y señala cuatro claves para la recuperación del sector

El sector de la castañicultura en España enfrenta una nueva y preocupante amenaza: la castaña china. Así lo advirtió este fin de semana Santiago Pereira, catedrático de la Universidad de Santiago y uno de los principales expertos en castañicultura a nivel nacional, durante la jornada organizada en Trabazos por la Asociación de Castañicultores de Castilla y León (ABCYL) en colaboración con la Diputación de Zamora. Según Pereira, el impacto de este producto foráneo podría agravar la ya delicada situación del sector, especialmente en el noroeste del país, donde el cultivo de la castaña es una actividad clave para las economías rurales.

“La castaña china, que ya representa el 25% de la producción mundial, supone una competencia desleal en términos de precio y calidad, y amenaza con desplazar al producto nacional en los mercados”, alertó Pereira. Este nuevo desafío se suma a los problemas que desde hace años aquejan al sector, como las plagas del chancro y la tinta, que han mermado considerablemente la productividad de los castaños españoles.

Las plagas y enfermedades no solo han afectado la producción de castañas, sino también la economía de muchas localidades que dependen de este cultivo como motor económico. Con la entrada de la castaña china en el mercado europeo, Pereira destacó que el sector podría enfrentarse a una crisis sin precedentes si no se toman medidas urgentes para proteger la producción nacional.

Durante el evento, los expertos y organizadores definieron cuatro líneas de actuación prioritarias para salvaguardar el sector:

  1. Protección del producto nacional: Crear marcas de garantía para la castaña española, siguiendo el ejemplo de Italia, que ya cuenta con siete denominaciones de origen protegidas. Estas certificaciones ayudarían a destacar la calidad y el origen del producto en el mercado internacional.
  2. Formación de los productores: Implementar programas formativos sobre técnicas avanzadas de cultivo, control de plagas y estrategias de comercialización. Esto permitirá a los agricultores afrontar los retos actuales con herramientas más eficaces.
  3. Incentivación del consumo internacional: Fomentar el interés de inversores y compradores extranjeros a través de misiones comerciales inversas, aumentando la presencia de la castaña española en mercados globales.
  4. Promoción del consumo interno: Lanzar campañas dirigidas a la población española para destacar los beneficios nutricionales y culturales de la castaña, incentivando su consumo y fortaleciendo la demanda nacional.