Vistiendo de negro, el Zamora buscaba golpear en los primeros minutos y Morales tendría la primera ocasión con un disparo que se marchaba desviado de la portería de Santomé. El dominio del Zamora se esfumaba a los pocos minutos y el Villalbés comenzaba a acumular llegadas de peligro. Izan, superado de hora, buscaba el primer palo de Troya a la media vuelta.
El Zamora, que vestía con su segunda indumentaria, se mostraba poco contundente ante un Villalbés que buscaba el error de los pupilos de Movilla. Era Kun el que tenía corría al contragolpe en una jugada que tuvo que intentar en solitario y que acabó con el delantero visitante trastabillándose como consecuencia del mal estado del césped de A Magdalena.
A falta de precisión, el Villalbés se mostraba como un equipo intenso y yendo al suelo a cortar jugada sin contemplaciones, eso sí, realizando entradas muy duras en ocasiones.
La intensidad local se imponía a los intentos de combinar de la medular del Zamora, embotellando a los de negro en el final de la primera parte. La última aproximación a portería la tendrían los de Movilla tras un saque de esquina que acababa sin peligro y que suponía el final del primer acto con el empate a cero.
Nuevamente salía mejor el Zamora en los primeros compases de partido y teniendo la posesión en campo rival. Pero sería el Villalbés el que iba a tener una ocasión muy clara tras un saque de esquina. Un lanzamiento que se abría buscaba la prolongación y el cabezazo dejó el balón muerto en el área pequeña encontrando rematador, aunque David Troya reaccionaba a la perfección y atajaba el esférico evitando el primer tanto.
La contundencia del Villalbés se volvía a imponer a un Zamora que no encontraba espacios para llegar a portería. David Movilla tenía que mover ficha con un triple cambio, dando entrada a Luis Rivas, Mancebbo y Bolo en lugar de Goñi, Morales y Sergi Baldrich, los tres desaparecidos durante todo el partido.
Parecía que el Zamora se asentaba con los cambios y comenzaba a embotellar en su área al conjunto gallego, quien también aprovechaba las contras para generar peligro.
También entraba Pito Camacho, sustituyendo a un Kun que realizó un gran desgaste durante los 75 minutos que estuvo sobre el campo. El partido entraba en una fase en la que los errores se iban a pagar muy caro y a punto estuvo de comprobarlo el Zamora tras una pérdida de Etxaburu que no terminaba de concretar el Villalbés.
El partido se estancaba y ninguno de los dos equipos eran capaces de generar ocasiones claras que inquietasen a los guardametas. Ya en el descuento, Carlos Ramos botaba una falta casi desde medio campo, el balón se paseaba por el área y Adrián Bolo, solo para empujarla, pisaba el esférico y no conseguía rematar prácticamente delante de línea de gol.
El partido llegaba al final después de otra ocasión de los de Movilla, en una jugada embarullada dentro del área. El empate a cero refleja el partido complicado debido al estado del césped y las condiciones meteorológicas. El Zamora encadena la novena jornada sin encajar gol y suma un nuevo punto para seguir como líder de la clasificación.
