Alberto Álvarez del equipo Extremadura-Pebetero ganó la etapa reina de la 41ª Vuelta Ciclista a Zamora, finalizada en Lubián. Maksym Bilyi y el CC Padronés-Cortizo lograron mantener el liderato general gracias a un gran trabajo de equipo en los últimos kilómetros. Así, la carrera se dirigirá a Padrón por tercer año consecutivo.
La etapa comenzó en Mombuey y, como es habitual en Sanabria, se formó una escapada temprana antes del alto de Padornelo. El grupo de fuga incluía a ciclistas como Vojtech Kmínek, Estanislao Calabuig, Aimar Erostarbe, Rubén Rodrigues y Pedro Crispim, quienes lograron más de 3 minutos de ventaja. Entre los perseguidores estaban Jon Gil, Mario Díaz, Oier Muñiz, Lorenzo Rimmaudo, Fabrizio Crozzolo y Brayden Bloch.
Con la llegada de estos perseguidores, la ventaja de la fuga subió a más de 6 minutos, avivando esperanzas de victoria. Sin embargo, tras el primer paso por Lubián y durante el ascenso a A Canda, el pelotón empezó a reducir la distancia, situándose a solo 3 minutos al llegar a Hermisende.
En las duras rampas de Ladiairo y Marabón, ciclistas como Jon Kade, Cristóbal Ramírez y Alberto Álvarez se destacaron. La escapada se redujo a los más fuertes: Erostarbe, Calabuig, Kmínek, Rodrigues y Crozzolo.
Kade, Ramírez y Álvarez alcanzaron la cabeza tras Ladiairo, y en las rampas de Marabón, Álvarez atacó para coronar en solitario. Kade, a solo 26 segundos del líder, puso en peligro la clasificación general, llevando a una emocionante persecución hasta Lubián. Finalmente, Álvarez cruzó la meta con 11 segundos de ventaja sobre Kade y Ramírez. Bilyi, acompañado por Marc Cabedo y José Luis Faura, llegó a 29 segundos, defendiendo el liderato por solo 8 segundos sobre Kade.
