¿Adiós a los entrenadores de gimnasio sin título universitario?
Una nueva regulación podría cambiar quién puede entrenarte en el gimnasio
El Ejecutivo prepara un decreto que busca unificar los criterios para el ejercicio profesional en el sector del entrenamiento deportivo. La propuesta ha generado polémica, ya que plantea que solo los graduados universitarios en Ciencias del Deporte puedan desempeñar la función de entrenador personal, relegando a los titulados en Formación Profesional (FP) a labores como la instrucción en actividades dirigidas.
Actualmente, tanto los graduados universitarios como los técnicos de FP pueden trabajar como entrenadores personales en los gimnasios. Sin embargo, la nueva regulación pretende diferenciar claramente los roles en función del nivel formativo, permitiendo únicamente a los universitarios diseñar y supervisar planes de entrenamiento personalizados. Por el contrario, los técnicos de FP quedarían limitados a impartir clases colectivas, como sesiones de spinning o zumba.
Desde el Gobierno se defiende que esta medida tiene como objetivo mejorar la calidad del servicio y garantizar la seguridad de los usuarios. La normativa busca asegurar que los entrenadores personales cuenten con una formación más amplia en áreas como anatomía y fisiología.
No obstante, la propuesta ha generado un fuerte rechazo entre empresarios del sector y profesionales de FP, que consideran que la normativa restringe el acceso laboral de miles de titulados cada año. Se advierte de las consecuencias laborales que podría acarrear esta regulación, limitando oportunidades en el sector deportivo.
El decreto aún debe pasar por el Consejo de Ministros antes de su aprobación definitiva. Mientras tanto, el debate sigue abierto entre quienes defienden una mayor especialización y quienes ven en esta medida una barrera para el acceso al empleo.