Jesús Hilario Tundidor: "Siempre es una emoción que te reconozcan en tu tierra"
El poeta, Premio Castilla y León de las Letras, afirma que el galardón ha sido "una sopresa"
"Ha sido una sorpresa, no me lo esperaba. Ya ni me acordaba del premio". Así, contento tras conocer la noticia, se mostraba el poeta Jesús Hilario Tundidor al otro lado del teléfono tras conocer que ha sido designado Premio de las Letras Castilla y León. Un galardón al que el zamorano ha sido nominado en diversas ocasiones y que viene a reconocer la brillante trayectoria de uno de los mejores poetas que ha dado la tierra zamorana.
"Está siendo un follón eso -afirma con su habitual sentido del humor- ; no te puedes imaginar la cantidad de llamadas y de mensajes que llevo recibiendo toda la mañana. Están llamando todos los amigos, compañeros, estoy un poco desbordado, pero también muy contento porque estas cosas a estas edades las disfrutas más".
Tundidor destaca el orgullo que supone el reconocimiento implícito que se hace a su obra desde la tierra que le vio nacer y, reivindicativo, solicita la distinción para otros autores zamoranos del mundo de las artes. "Para mí es una emoción que en tu tierra se valore tu obra. Ahora lo que tienen que hacer es reconocérselo a Coomonte, que es el mejor escultor que tenemos, y a Pedrero, que además de ser amigo para mí es el mejor pintor de Zamora y de España y no sé cómo aún no lo tienen. Y es algo que he dicho siempre, porque Zamora tiene unas personalidades en el mundo del arte que lo merecen".
Jesús Hilario Tundidor ha recibido el galardón tras varios años nominado. "Ha sido una sorpresa, la verdad es que ya no me lo esperaba. Ya ni me acordaba de que estaba nominado. Si me lo hubiesen dado más joven, pues lo hubiese disfrutado de otra manera y así ahora también lo disfrutas, pero te mueres cualquier día" afirma con su habitual sentido del humor.
Este galardón, el más importante que se concede en la Comunidad, viene a sumarse a la larga lista de premios que avalan la obra del poeta como el Adonais (1962); Álamo (1969); González de Lama (1972); Esquío (1981), además de otros en reconocimiento a su obra poética como el premio "San Juan de Baños, 1997"; Premio de la Academia Castellano-leonesa de Poesía 1999; Premio "León Felipe, 2000", por el valor humano de su poesía en la que conviven los valores éticos y estéticos; y Premio de la Asociación Madrileña de Críticos 2006 al mejor libro de Ediciones sobre Arte.
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