Felicidades, Claudio

Claudio Rodríguez cumpliría hoy 80 años. (Foto:dosisdeliteratura.wordpress.com)

Cinco poemarios bastaron para convertirlo en uno de los poetas más universales del siglo XX

El 30 de enero de 1934 venía al mundo Claudio Rodríguez, uno de los poetas más universales de la segunda mitad del siglo XX. El zamorano hoy hubiese cumplido 80 años, aunque la muerte nos lo arrebató prematuramente un 22 de julio de 1999. Zamora, la ciudad que tanto quiso y paseó, la ciudad que lo habitaba, su cuna y su mortaja, lo despidió junto a la piedra de la muralla, al pie de su río Duero/Duradero. Zamora honra y guarda su memoria. En este 30 de enero de 2014, en tu ochenta cumpleaños: felicidades, Claudio.

Cinco poemarios y una edición fascímil póstuma bastaron para convertirlo en una de las figuras más relevantes de las letras españolas del siglo XX. Con su don de ebriedad, su don de gentes, su don de poesía, Claudio Rodríguez estaba en posesión de los premios más importantes como son el Adonais (1953); Nacional de la Crítica (1965); Nacional de Poesía (1983); Castilla y León de las Letras (1986); Príncipe de Asturias de las Letras (1993); y Reina Sofía de Poesía Iberoamericana (1993).

Claudio, Cayín, estudió el bachillerato en el Claudio Moyano y jugaba al fútbol. Al morir su padre en 1947 su vida da un giro decisivo al quedar la familia en una situación complicada, por lo que el poeta se dedica a la administración de las fincas en el campo y a tratar con jornaleros.

Observador y andariego por naturaleza, da largos paseos por la ciudad y las orillas del Duero, su río Duradero. Por la Zamora que supo hacer universal desde lo humilde del surco y del vino, de la claridad que siempre viene del cielo. Gracias a la biblioteca paterna lee a los clásicos (en particular a los místicos) y a los poetas franceses del XIX como Baudelaire, Verlaine y Rimbaud. Hacia 1948 escribe sus primeros poemas y publica una "Nana de la Virgen María" en el Correo de Zamora, en 1949. Dos años más tardes se traslada a Madrid para estudiar Filología Románica con una beca y los 18 años gana el premio Adonais por "Don de la ebriedad" -considerada una de las publicaciones más brillantes del XX-, libro que impresiona a Vicente Aleixandre con el que mantendrá una amistad profunda y a quien dedicará su libro Conjuros. En 1953 conoce a Clara Miranda, quien será su compañera durante toda la vida; la gran mujer que siempre coexiste junto a un gran hombre.

En 1957 se licencia con una tesis sobre "El elemento mágico en las canciones infantiles de corro castellanas" (hay que destacar su recreación de los juegos infantiles en su obra) bajo la dirección de Rafael de Balbín y un año más tarde publica Conjuros y, con la ayuda de Dámaso Alonso y Vicente Aleixandre, viaja a Inglaterra, donde trabaja como lector de español en Nottingham (1958-1960) para trasladarse posteriormente a Cambridge (1960-1964), con el mismo cargo.

Junto a Eladio Cabañero, Ángel González, José Ángel Valente y Carlos Sahagún conforma el grupo poético madrileño que se dio a conocer en la década de 1950-1960, al que los críticos bautizaron con el nombre de Generación de los 50.

De regreso a Madrid, se dedica a la enseñanza universitaria y los años setenta significan la consagración definitiva del poeta. El 17 de diciembre de 1987 es elegido miembro de número de la Real Academia Española, en el sillón dejado vacante por Gerardo Diego y en marzo de 1992 lee su discurso de ingreso a la RAE, titulado: "Poesía como Participación: Hacia Miguel Hernández". En 1993 publica Casi una leyenda, el que será su último libro de poemas. El 28 de marzo de 1993 recibe el Premio Príncipe de Asturias de las Letras y 5 días después el II Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana de la Universidad de Salamanca.

Claudio Rodríguez muere en Madrid el 22 de julio de 1999. Sus restos mortales descansan en el cementerio de San Atilano, en una tumba realizada por Luis Quico, uno de sus amigos de siempre, como también siempre lo fueron Agustín "el Rejo", Tomás Crespo o Antonio Pedrero, quien lo retratase en su mural "La Golondrina" junto a Ramón Abrantes y Julio Mostajo.

 

Artículo de Ana Pedrero: En tu NO cumpleaños