De lo convencional a lo diferente, Siloé y Ultraligera triunfan en una Zamora entregada al "indie"
La noche del lunes 24 de junio, la Plaza Mayor de Zamora se convirtió en un epicentro de vibraciones indie, atrayendo a una multitud de aficionados a este género musical. En el marco de las festividades de San Juan, los grupos Siloe y Ultraligera ofrecieron un concierto memorable que dejó a la audiencia encantada.
Siloe, formado por el vocalista y cantautor Fito Robles, el guitarrista y productor Xavi Road, y el batería Jaco Betanzos, ha logrado una evolución impresionante en su estilo. Este trío de Valladolid ha sabido mezclar de manera magistral la canción de autor folk y el pop/rock con la electrónica más bailable, creando un sonido único y cautivador. Sus interpretaciones de canciones famosas y queridas por sus seguidores les permitieron conectar profundamente con el público, metiéndose a todos en el bolsillo con su carisma y talento.
La noche comenzó con Ultraligera, que tuvo la misión de calentar el ambiente. Formada por Javier Gismero (voz y guitarra), Coque Fernández (guitarra solista), Santiago Urrela (bajo) y Eduard Miguez (batería), Ultraligera no defraudó. Con su energía y estilo distintivo, prepararon a la audiencia para una noche de disfrute y música de calidad. Sus interpretaciones cargadas de emoción y dinamismo establecieron el tono perfecto para la actuación principal.
VÍDEO E IMÁGENES EN LA PLAZA MAYOR
A medida que avanzaba la noche, la Plaza Mayor, repleta de gente, vibraba con cada nota y cada canción. El público, compuesto por fanáticos devotos del género indie, disfrutó de una atmósfera festiva y vibrante, donde la música fue la protagonista indiscutible. Los asistentes no solo aplaudieron y corearon cada tema, sino que también disfrutaron de la experiencia compartida de una noche inolvidable en el corazón de Zamora.
Este concierto fue un claro ejemplo de cómo la música puede unir a las personas, creando momentos mágicos y memorables. La presencia de Siloe y Ultraligera en el lunes de San Juan subraya la riqueza cultural de las festividades zamoranas y su capacidad para atraer y deleitar a públicos diversos con propuestas musicales de alta calidad.