El Sindicato de Enfermería, SATSE, en Castilla y León ha presentado sus alegaciones al borrador del anteproyecto de Ley de Función Pública y considera que no es el momento de avanzar en una nueva Ley.
Dada la futura modificación del Estatuto Básico del Empleado Público que se va a llevar a cabo a nivel estatal tras las recientes sentencias del Tribunal de Justicia de la Unión Europea en relación a los interinos de larga duración, desde el Sindicato de Enfermería consideran que no es el momento de avanzar en el desarrollo de una nueva Ley y que “se debería esperar a la modificación del EBEP”. “Por el contrario, estaríamos hablando de una Ley de carácter autonómico que nacería o bien ya obsoleta o que habría que modificar inmediatamente tras su publicación, lo que no tiene sentido”, precisa SATSE Castilla y León.
SATSE ha realizado alegaciones fundamentalmente a la parte del articulado que puede afectar a las condiciones laborales de los trabajadores, haciendo hincapié en la intención de la Junta de Castilla y León de seguir limitando el acceso de los empleados públicos del grupo A2, que es el caso de las enfermeras y fisioterapeutas, a los puestos directivos.
El EBEP estableció que transitoriamente, las antiguas titulaciones de diplomados universitarios se englobarían en el grupo A2 hasta que se determinara su inclusión o no en el grupo A1 en función de su nivel de responsabilidad y exigencia en las pruebas de acceso. Tras catorce años. La Administración de Castilla y León no ha corregido esta transitoriedad y quieren seguir limitando el acceso a determinados puestos cuando actualmente todas las titulaciones universitarias son de Grado, ya que han desaparecido las diplomaturas y las licenciaturas. “Pretenden seguir con una medida obsoleta que no tiene en cuenta la valía y la capacidad de sus empleados públicos”, sostiene SATSE.
