El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ha participado en un debate sobre los grandes carnívoros en el evento ‘Coexistencia de ganadería y grandes carnívoros en Europa’ en el Comité Europeo de las Regiones de Bruselas. En su intervención, el consejero ha enfatizado la posición de la Junta de Castilla y León sobre el tema de la gestión del lobo, compartida por otras comunidades autónomas. Esta posición difiere de forma radical de la postura adoptada por el Gobierno de España, que es contraria a la defendida tanto por estas comunidades como por Rumanía y muchos países de la Unión Europea que respaldaron la idea en el Consejo de Agricultura los pasados 26 y 27 de junio de 2023 de estudiar la flexibilización de la Directiva Hábitats sobre el régimen jurídico de los grandes carnívoros, como el lobo.
El consejero de Medio Ambiente Vivienda y Ordenación del Territorio, ha rechazado las acciones del Gobierno de España, que se opone a buscar la flexibilización del régimen de protección del lobo de la Directiva Europea Hábitats, y ha endurecido las medidas de protección en España retirando a las comunidades autónomas las competencias de gestión de la especie, lo que ha provocado un aumento significativo de los ataques a la ganadería extensiva y semi-extensiva en la Comunidad en 2022, llegando a 5.000 cabezas de ganado muertas, un 20 % más que el año anterior, y en aumento. Suárez-Quiñones ha señalado que estos ataques llevan al abandono de explotaciones ganaderas, poniendo en peligro la producción de alimentos de calidad, aumentando el riesgo de incendios forestales y contribuyendo a la despoblación del medio rural, y generando daño social y económico para el noroeste rural si no se deroga de inmediato la inclusión del Lobo en el LESPRE.
Suárez-Quiñones ha explicado que “trabajamos y trabajaremos por ponernos, como país, al lado de estados miembros como Rumanía y una lista larga de ellos que defiende que, después de 30 años de directiva hábitats, en buena lógica, la situación de hecho es necesariamente distinta, siendo otra la Unión, la situación de las poblaciones y los intereses en juego, y exige que la Unión y los estados estudien con profundidad y decisión cuál es la situación real de conservación de la especie, monitoricen la misma y se determinen las medidas de flexibilización de la directiva y del régimen de sus Anexos”. En el debate se habló de cómo alcanzar la paz en este tema, manifestando el consejero que “alcanzar la paz en esta situación consiste en eliminar o rebajar al máximo el conflicto mediante la vuelta a un equilibrio razonable, pero tampoco hay paz sin Justicia, y en la actual situación no la hay ni para los ganaderos ni para el mundo rural”.