El Zamarat firma una exhibición y cierra la Liga regular en cuarta posición

Zamarat vs Azul Marino
Las naranjas dominan de principio a fin en el Ángel Nieto y encaran la fase de ascenso lanzadas tras una contundente victoria

La tarde en el pabellón Ángel Nieto no fue solo la última parada de la Liga regular. Fue, sobre todo, una declaración de intenciones. El Zamarat eligió el mejor escenario y el mejor rival posible para recordarle a todos que este equipo quiere más, que su camino no acaba aquí.

Desde el primer salto, las naranjas jugaron como si cada balón fuera el último. Aina abrió el marcador y, aunque el Azul Marino amagó con plantar batalla, pronto el vendaval zamorano arrasó cualquier resistencia. Lideradas por una Sara Castro que parecía tener un imán para el aro y con Polleros castigando desde el perímetro, las zamoranas marcaron territorio muy pronto. Cada ataque era un puñetazo en la mesa, cada defensa una muralla difícil de atravesar.

La grada, en comunión con el equipo, empujaba en cada jugada. Y cuando Azul Marino intentaba reaccionar, se encontraba con un Zamarat que no solo no temblaba, sino que pisaba todavía más fuerte. Al descanso, la ventaja era cómoda, pero lo más importante era la sensación: las zamoranas jugaban con alegría, con hambre, con un ritmo imposible de igualar.

La segunda mitad trajo el intento desesperado del rival, que por momentos redujo la diferencia. Pero las de Vasconcelos no se dejaron atrapar. Polleros, de nuevo letal desde más allá del 6,75, apagó cualquier esperanza mallorquina. Y cuando el partido ya estaba encarrilado, fue el turno de la cantera. Arnés, Lorena y Palmero tomaron el relevo en un escenario que parecía reservado para las grandes citas.

El pitido final certificó una victoria brillante y el punto de partida de un sueño que sigue muy vivo: el de regresar a la élite del baloncesto femenino. El Zamarat, cuarto en la clasificación, llegará a la fase de ascenso con la mejor de las armas: la fe en su juego y una grada que ya sueña despierta.