El nueve de febrero, la fecha clave para la gran tractorada en Zamora y Benavente

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La movilización, planeada en línea con las protestas que han tenido lugar en Francia y Alemania, busca hacer historia en Zamora y enviar un mensaje claro sobre la insatisfacción del sector

La política agraria europea para los próximos años ha generado un profundo malestar en el sector primario, desencadenando una serie de protestas lideradas por las principales organizaciones agrarias en la provincia de Zamora. Lorenzo Rivera, líder provincial de COAG, expresó su desacuerdo con la nueva Política Agrícola Común (PAC), calificándola como "verde y ecologista" y acusándola de favorecer a aquellos que no se dedican a la producción, en detrimento de los agricultores y ganaderos.

Las declaraciones de Rivera reflejan el sentir general de los agricultores y ganaderos en la región, quienes denuncian una PAC que consideran "nefasta". Las protestas, convocadas en unidad de acción por COAG, Asaja y UPA, evidencian la preocupación del sector primario por las consecuencias de esta política agraria en la producción de alimentos en España.

Por su parte, Antonio Medina, presidente de Asaja Zamora, advierte que la nueva PAC parece orientarse hacia la reducción de la producción agrícola y ganadera en España. Señala que si Europa no desea que se produzcan alimentos, los consumidores pueden prepararse para un encarecimiento y posiblemente desabastecimiento en el mercado. Esta perspectiva genera inquietud sobre el futuro de la seguridad alimentaria en la región.

Y, Aurelio González, máximo representante de UPA Zamora, resume el sentimiento del campo al solicitar que se permita a los agricultores y ganaderos continuar con su labor de producir alimentos. La implementación de la nueva PAC desde 2017 ha generado, según los líderes agrarios, una disminución en la competitividad de las explotaciones, afectando directamente a los trabajadores del campo.

El malestar en el sector agrario de Zamora ante la nueva PAC se intensifica con la convocatoria de una tractorada, reflejando la preocupación por el futuro de la producción de alimentos en la región. Las críticas a la política agraria europea subrayan la necesidad de un diálogo más amplio y equitativo que tome en cuenta las preocupaciones y necesidades de los agricultores y ganaderos, asegurando así un enfoque sostenible y justo para el sector primario en el futuro.