Tras varios meses de instalación, los agricultores de Coreses ya disfrutan del nuevo sistema de riego basado en la instalación de hidrantes alrededor de las parcelas y terrenos del pueblo.
Esta nueva forma de regar las tierras sustituye a las tradicionales acequias, que en los últimos años distribuían el agua del canal Toro-Zamora a los agricultores de la localidad; un procedimiento que más laborioso y que conllevaba un mayor gasto de agua.
A pesar de que la implementación de estas nuevas técnicas de riego suelen conllevar gastos económicos, de recursos, tiempo y acuerdos con los propietarios de las tierras, actualmente su funcionamiento es correcto en todos los terrenos del lugar.
En el caso de Coreses, se ha optado por la instalación bajo tierra de los conductos. Esta forma de riego consiste distribuir el agua del canal a través de bocas de riego o tomas de agua. En esta localidad se ha instalado una toma de agua para distribuirla por varias parcelas de forma subterránea. Antes de llegar a estas bocas, el caudal es recogido por un hidrante. El riego por pívots o aspersión son de las más comunes en la localidad.
Una nueva forma de riego
Coreses es una más de las múltiples zonas de Zamora que ya han adaptado sus terrenos a las nuevas técnicas de riego. El riego por hidrantes se establece de acuerdo a la normativa europea UNE-EN 14267 para eliminar la forma de riego tradicional y aprovechar mejor los recursos naturales y el agua.
El hidrante conduce, a través de conductos, el agua hasta las bocas de riego, que se instalan para una o varias parcelas. La cantidad de agua que se distribuye es variable. El criterio que normalmente se sigue es la extensión del terreno, de tal manera que los que posean más tierras para regar, recibirán más cantidades de agua. El hecho de que llegue más o menos líquido depende de la anchura de los conductos para distribuirla.
Los hidrantes estarán controlados por un contador informatizado. Además, esta nueva técnica permitirá otros servicios como cortar rápidamente el suministro en caso de problemas y regular la presión a la que se distribuirá el caudal.
Entre las principales ventajas que trae este nuevo riego está la canalización del suministro y el ahorro en agua. Hasta ahora, con el riego por acequia se desperdiciaban varios litros de agua, mientras que los hidrantes regularán la cantidad de caudal que ha de recibir cada parcela para que esté regada correctamente y aprovechar los recursos hidráulicos en unos meses en los que la lluvia ha escaseado en esta zona.