Con el Castillo de los Condes de Benavente como protagonista, el conjunto histórico-artístico ha acogido un sinfín de actividades, espectáculos y puestos de artesanía. Desde juglares y trovadores hasta malabaristas y caballeros , el ambiente ha estado cargado de magia y tradición. Las Tabernas Medievales han sido el lugar perfecto para disfrutar de exquisitos pinchos y bebidas, mientras que los artesanos mostraban sus habilidades en 58 oficios diferentes.