Nuestro especial Gladiador de la silla de ruedas
Como un jabato, un gladiador de los de película así era nuestro Luis Ángel Argüello.
Un hombre del 69 con un cariz especial que jamás dejó que las ilusiones y la fuerza le dejarán de acompañar. Hace más de 30 años nos conocimos y realmente me siento muy orgulloso de tenerle como amigo.
Pero claro, también tiene a su princesa Leia (Marina) que sigue luchando con una fuerza que realmente aún hoy y tras toda una vida de sacrificio desinteresado y amor sin parangón no sé de dónde saca.
La vida no es fácil, esta es la pura realidad, y menos lo fue para Luis Ángel, un accidente postró en una silla de ruedas a nuestro gladiador de la vida, en eso, en la flor de la vida.
Su lucha por mantener la segunda oportunidad que le dio esta que vivimos para vivirla, nos hacía ver a todos a Luis en muchas ocasiones como un superhéroe, y realmente lo era.
Lo demostró hasta el final de este trance en el que estamos todos llamado vida, y no nos deja, lo mantenemos vivo en nuestra mente recordándole siempre con el espíritu positivo que siempre tuvo. Luis volverá a casa con Marina y Luisete de otra forma pero volverá.
Y seguirá en nuestro grupo de WhatsApp porque se preocupó hasta el final de nosotros, estuvo pendiente y ya estando muy malito nos envió varios mensajes que jamás olvidaremos e incluso compró el décimo de lotería que todos los años nunca nos toca. Nuestra mejor lotería sigue siendo la de mantenernos como lo que somos y seremos siempre, amigos.
Allá donde estés querido compañero y amigo tus compañeros del CEI te tenemos presente y seguiremos dándote los buenos días, las mañanas frías de invierno, las soleadas del verano y seguiremos tomando White Label con Coca cola ahora más que nunca y en tu memoria.