Los vecinos de Cabañales alzan la voz contra el ruido del festival en las aceñas: “Solo pedimos descansar”

Aceñas de cabañales
La celebración de un evento musical en las aceñas de Cabañales desata el malestar de los residentes, que denuncian la falta de respeto al descanso vecinal y piden un modelo cultural más respetuoso

El eco de la música no solo retumbó este sábado 7 de junio en las aceñas de Cabañales, sino también en los hogares del barrio, donde numerosos vecinos expresaron su indignación por el volumen del festival que se prolongó hasta bien entrada la madrugada. A través de una nota dirigida a los medios, han manifestado su “queja por el mal uso de las aceñas” y han pedido una reflexión seria sobre el modelo de ocio que se promueve desde las instituciones.

“Deseamos mostrar nuestra queja por el mal uso de las aceñas, si son tan amables de escucharnos”, comienza el comunicado vecinal, donde se subraya que la música seguía sonando a todo volumen en plena madrugada. “Entendemos que es un negocio y los empresarios han de hacer caja, pero el festival es muy ruidoso y estimamos que el descanso de los vecinos hay que respetarlo”.

Los residentes denuncian que el ruido fue constante “durante todo el día” y critican que este tipo de actividades se celebren en un entorno natural como el río, afectando tanto a las personas como a la fauna. “No creo que las aves salgan muy bien paradas con tanto ruido y jaleo”, alertan, recordando que el entorno de las aceñas es un enclave natural y patrimonial de gran valor.

Lejos de oponerse a la actividad cultural, los vecinos reclaman un “modelo de ocio más solidario, pensando en todos, no solo en quien haya pagado la entrada”. Defienden que “con menos decibelios también se puede disfrutar y dejar dormir a los zamoranos”, e insisten en que hay personas mayores, enfermas o trabajadores que no pueden conciliar el sueño cuando el ruido se prolonga durante horas.

“El derecho al descanso, al silencio, es la gran asignatura pendiente que tenemos como sociedad. Es verdaderamente agotador no poder descansar por una fiesta privada celebrada en un terreno público”, concluye el escrito, en el que apelan a las autoridades a tener en cuenta esta crítica como una aportación constructiva.