Rabiche: una emergencia que saca lo mejor de Zamora

guarido auxi y secretariado gitano
El Ayuntamiento de Zamora activa todos sus recursos para atender a las familias evacuadas tras el derrumbe del muro de contención en Rabiche y lanza una llamada urgente a la ciudadanía para el alquiler solidario de viviendas

El Ayuntamiento de Zamora ha comparecido esta mañana en rueda de prensa para actualizar la situación del barrio de Rabiche tras el derrumbe parcial de un muro de contención que obligó a evacuar de urgencia a varias familias.

El alcalde Paco Guarido, acompañado por responsables de Servicios Sociales y del Secretariado Gitano, ha explicado los avances tanto en la obra como en la atención social a los afectados.

Obra de emergencia en marcha

La maquinaria ya trabaja en la zona afectada y, según el regidor, “la intervención técnica va bien”. Se estima que en un plazo de unos diez días se retirarán las más de 300 toneladas de hormigón y se podrá iniciar la reconstrucción del muro. La intervención ha comenzado en tiempo récord gracias al acceso facilitado por una parcela privada que permite llegar a la parte trasera de la estructura.

Soluciones urgentes para las familias

Mientras tanto, las familias desalojadas han sido realojadas temporalmente en hoteles como solución de emergencia. El Ayuntamiento también ha reactivado la casa de acogida, una instalación gestionada con el apoyo del Obispado, que permanece como opción de reserva para aquellos que no encuentren otra alternativa.

Paralelamente, se ha activado un decreto de emergencia social que permite al Consistorio buscar viviendas de alquiler a corto plazo, entre dos y tres meses, con garantías plenas para los propietarios. “El Ayuntamiento asumirá los pagos, responderá ante cualquier desperfecto y formalizará los contratos como arrendatario directo”, aseguró Guarido.

Llamada ciudadana a la solidaridad

La concejala de Servicios Sociales, Auxi Fernández, hizo un llamamiento directo: “Apelamos a la solidaridad de los zamoranos. Si alguien tiene una vivienda que pueda alquilar de forma temporal, que sepa que el Ayuntamiento se responsabiliza de todo”.

Además, se están contactando con inmobiliarias locales y se busca una fórmula eficaz para cubrir el déficit de viviendas disponibles por periodos breves, una modalidad poco común en el mercado de alquiler tradicional.

Rabiche, un barrio con rostro humano

La rueda de prensa fue también una oportunidad para dar visibilidad al barrio de Rabiche y romper estigmas. Carlos, coordinador del Secretariado Gitano, agradeció la respuesta rápida del Ayuntamiento y señaló que la situación ha visibilizado una realidad muchas veces ignorada: “Rabiche ha sido el elefante en la habitación durante años. Ahora ha pedido atención por una cuestión tan básica como la vivienda”.

Tanto él como los responsables municipales reconocieron que persisten problemas estructurales de discriminación en el acceso a la vivienda por razones de etnia o procedencia. “No es solo falta de vivienda, también es racismo”, afirmó Carlos con contundencia. “Reconocerlo como sociedad puede ser el primer paso hacia el cambio”.

“Nunca se rompió el diálogo”

A pesar de los momentos de tensión vividos durante la evacuación, el alcalde y los concejales subrayaron que el diálogo con las familias jamás se ha interrumpido. “Todos hemos aprendido algo en estos días. Ellos han visto que el Ayuntamiento no los abandona y nosotros, que Rabiche existe y merece ser tratado como cualquier otro barrio de la ciudad”, afirmó Hernández emocionada.

El Ayuntamiento mantiene reuniones individualizadas con las familias para dar una respuesta adaptada a cada situación. Se calcula que serán necesarias nueve viviendas, aunque también se manejan soluciones mixtas, como alojamientos compartidos con familiares, siempre con apoyo económico municipal.

presidente secretariado gitano en Zamora

En su intervención, Carlos reivindicó el papel de los servicios sociales como “la cara más humana del Ayuntamiento” y defendió la dignidad de todas las soluciones ofrecidas, incluida la casa de acogida: “No es un hotel de cinco estrellas, pero es un alojamiento digno, con habitaciones dobles, cocina y zonas comunes. Es un recurso público con todas las garantías”.

El caso de Rabiche ha abierto una nueva conversación en Zamora. No solo sobre urbanismo o emergencias, sino sobre convivencia, prejuicios y solidaridad. “Esta situación puede ser un punto de inflexión para trabajar de otra manera en Rabiche y con toda la ciudadanía”, concluyó la concejala.