Lo de Leandro es otra cosa

Los tres diestros y el novillero antes de hacer el paseíllo (Fotos: Arturo Delgado)

Óscar Higares, Leandro y Álvaro García desorejan a sus novillos en el festival de Moraleja del Vino.

Moraleja del Vino ha recuperado su tradicional festival taurino en una tarde de tinte triunfal en la que Leandro, Óscar Higares y el novillero Álvaro García han desorejado a sus respectivos novillos de Santa María de los Caballeros, de Fuentelapeña, mientras que El Fundi ha saludado después de fallar con los aceros.

Con casi lleno en los tendidos y un ambiente festivo ha recuperado Moraleja del Vino su tradicional festival taurino, una cita ya consolidada para los aficionados de la provincia que han respondido acudiendo al festejo organizado por el empresario Luis Miguel Ballesteros en el que han destacado los torerísimos apuntes de Leandro y la disposición y firmeza del novillero Álvaro García, ganador del Garbanzo de Oro de Fuentesaúco 2013.

Se han lidiado cuatro erales de la ganadería zamorana de Santa María de los Caballeros (de Fuentelapeña, procedencia La Campana) bien presentados, con cuajo y movilidad en una tarde en la que Leandro ha dejado apuntes del toreo caro que atesora, si bien le tocó en suerte un animal flojo que le buscaba y recortaba por ambos pitones, con el que firmó ajustados lances capoteros rematados con una preciosa y torerísima media y al que pudo arrancarle lances sueltos de gran calidad tirando con gran suavidad y temple de su embestida, por encima del jabonero que, aunque noble y encastado, perdía las manos por falta de fuerzas, lo que impidió que la faena tomase altura.

Aún así, lo del vallisoletano con raíces toresanas es otra cosa. No es sólo técnica o conocimiento; es arte, es gusto, es un toreo preciosista, clásico, componiendo siempre la figura, que injustamente se ve relegado en plazas y ferias de importancia aunque tiene por derecho propio un hueco entre los buenos aficionados.

También ha destacado en Moraleja el novillero Álvaro García, asentado con la muleta, citando con suaves toques, siempre bien colocado y con ganas de hacer muy bien las cosas, que firmó naturales de buena factura ante un novillo muy cuajado que supo entender por ambos pitones y al que despachó de una estocada sin puntilla incontestable.

Óscar Higares, que también paseó dos orejas excesivamente fáciles, recibió con airosos lances a la verónica a un novillo muy cuajado y con muchos pies de salida, para después perderse en un trasteo vulgar e insustancial, despegado y sin acoplarse, si bien el animal tampoco terminó de entregarse en ningún momento.

En cuanto a José Pedro Prados El Fundi ha mostrado su oficio y veteranía con un novillo un tanto incierto que calamocheaba y cortaba por el izquierdo, lo que le costó un revolcón al intentarlo por ese pitón tras mostrarse poderoso por el derecho. Falló con los aceros, lo que le privó de un trofeo en una tarde excesivamente generosa por parte de la presidencia y en la que la auténtica triunfadora ha sido la afición zamorana, que ha recuperado un festejo de gran tradición en su calendario taurino y que ha podido disfrutar de los apuntes toreros de Leandro y seguir de cerca la proyección de Álvaro García.

Ficha del festejo

Plaza de Toros de Moraleja del Vino. Con casi lleno en los tendidos en tarde bochornosa y con ligero viento se han lidiado cuatro erales de Santa María de los Caballeros muy cuajados, depuntados según permite el reglamento, con movilidad y de buen juego en general.

El Fundi: ovación con saludos.Óscar Higares:dos orejas. Leandro:dos orejas. Álvaro García: dos orejas.