La compañía Gas & Power, Grupo Naturgy, corta el gas a una familia de Zamora sin motivo ni previo aviso y la deja sin agua caliente ni calefacción desde hace días
Sin razones y sin siquiera previo aviso la compañía Reguladora Gas & Power, del Grupo Naturgy, ha sido capaz de contestar a las peticiones de los cuatro miembros que se encuentran sin agua caliente ni calefacción desde hace cinco días, y que no tienen ningún recibo impagado ni ninguna factura devuelta desde que se dio apertura a su contrato con la compañía, a la cual la familia va a denunciar por daños y perjuicios.
En Zamora, concretamente en la localidad de Morales del Vino, una familia de cuatro miembros, dos de ellos menores de 2 y 10 años respectivamente, sufre desde hace cinco días los avatares de un mal entendido que acabará en los tribunales ya que los progenitores han decidido denunciar el caso ante consumo y las autoridades judiciales pertinentes. Una sin razón burocrática que ha dejado a la familia, desde hace ya cinco días, sin calefacción ni agua caliente en pleno invierno.
De noche y sin permiso los operarios de la compañía se introdujeron en una de las urbanizaciones situadas a la entrada de la localidad de Morales del Vino y precintaron tres contadores, al menos uno de ellos por error, puesto que la familia damnificada no tiene constancia de ningún aviso ni tampoco ha existido por su parte ningún impago, como certifican las facturas abonadas hasta el presente mes de febrero a las que ha tenido acceso Zamora News.
Esta familia zamorana no tiene gas (tras un corte de suministro, aún no se sabe el porqué) y, por tanto, tampoco calefacción ni agua caliente. Un problema a cuenta de una negligencia que está tipificada en la ley y que podrá llevar a los tribunales a la sociedad energética, en este caso Naturgy, al dejar a dos menores y sus padres sin los servicios básicos de calefacción y agua caliente en pleno mes invernal de febrero. Una normativa a la que en muchos casos familias con problemas de falta de recursos se acogen y que en este caso el dinero y la falta de pago o recursos no es el motivo.
La familia cuenta a través de la madre que el jueves ya notó la falta de suministro pero entendió que podía ser una avería y se intentó poner en contacto con la compañía. Al no ser una avería y percatarse de la acción de la compañía intentó, sin éxito, solucionar el problema de suministro con llamadas a los departamentos correspondientes, donde se sigue sin hacer caso de la reclamación que acabará en consumo y, según ha comunicado la familia damnificada a este medio, en el juzgado, donde se pondrá la correspondiente denuncia por un corte de suministro sin motivo alguno.
La impotencia de la madre ha llevado a que los niños se hayan tenido que trasladar a los domicilios de abuelas y tías mientras el cúmulo de despropósitos sigue un curso que nunca debería haber tomado.
La delegación en Zamora de la compañía que gestiona el caso es NEDGIA, y proponen como solución la paciencia. Está claro que la paciencia se puede mantener cuando de personas mayores se trata y siempre por causas de fuerza mayor, pero en esta circunstancia, tal y como comenta la madre a este diario, ya no se trata de paciencia sino de salud: "Menos mal que no está haciendo demasiado frío, si esto nos pilla en diciembre con las heladas y los termómetros bajo cero lo mismo estábamos en el hospital". La salud del pequeño de la familia es delicada, lo que le ha obligado a pasar en el mes de diciembre unos días en el hospital, situación que podría darse de nuevo si no se pone sentido y solución a un corte y precintado del contador de gas, que sigue sin ser una solución para un problema burocrático que ha dejado indefensa a una familia de cuatro miembros del municipio de Morales.
No hay solución para un problema como este, que puede afectar a la salud de un pequeño y que ha tenido que ser trasladado a casa de un familiar porque los departamentos de atención al cliente de la compañía están haciendo cursos, quizá sea para vender soluciones a problemas, aunque a este no le ha tocado aún. Está claro que un desahucio o un alzamiento son razones de impago que pueden tener justificación, pero en el caso que nos ocupa el "grito pelao" de una madre por los derechos de sus hijos priman, por supuesto.
A la hora de confeccionar esta información no se ha dado paso aún al suministro de gas en la vivienda, lo que supondrá una nueva jornada con temperaturas que rondan los 10 y 11 grados en el interior de la vivienda durante la noche. La solución debería ser la inmediatez y las disculpas públicas, aunque nos tememos que será un día más el que pasen sin suministro y sin que se de solución a un problema que raya en el absurdo y en la desatención de una familia con dos pequeños, indefensos ante la negligencia de una compañía de gas que no cumple las normas establecidas, ni utiliza el sentido común, ni tampoco el tacto con el cliente final.