La Fuente de la Salud en la N-122, un paraje histórico de Zamora abandonado a la basura y la desidia
Ecologistas Zamora alerta sobre el estado de abandono y degradación de la Fuente de la Salud, un paraje de alto valor ecológico en la carretera N-122, donde la vegetación y el agua conviven con basuras y ruinas.
El colectivo Ecologistas Zamora ha recibido diversas denuncias ciudadanas que alertan sobre el estado de la Fuente de la Salud, situada en la carretera N-122, dentro del término municipal de Zamora. Este lugar, conocido históricamente como El Puerto Penadillo, fue concebido en los años setenta del siglo XIX como área de descanso para viajeros y caballerías.
El paraje destaca por su alto valor ecológico, con zonas muy arboladas, umbrías y húmedas, donde discurre el arroyo de la Fresneda y brotan manantiales como la Fuente de la Salud y, más cerca de la ciudad, la de Guimaré. Su construcción en piedra y con un caño para beber denota la importancia que antaño se le daba al lugar como punto de descanso y recreo.
Sin embargo, tras la construcción de la variante del Puerto en la N-122 durante los años noventa, el área quedó degradada. Hoy se encuentra abandonada, con basuras acumuladas que las papeleras no logran contener y pintadas que intentan borrar su pasado. Grandes camiones estacionados convierten el paraje en un retrete al aire libre, mientras que las infraestructuras de la fuente y los muros muestran un avance de la ruina y el deterioro.
Ecologistas Zamora lamenta que un lugar de gran interés ambiental y cultural permanezca en estas condiciones y destaca que podría recuperarse para uso público, fomentando el ocio, los senderos y la conexión con la naturaleza. Señalan que la Demarcación de Carreteras de Zamora, dependiente del Ministerio de Transporte, realizó alguna intervención que apenas consistió en un hormigonado delante de la fuente, sin recuperar su valor histórico ni ambiental.
El colectivo insta a las administraciones competentes, incluyendo la Demarcación de Carreteras y la Junta de Castilla y León, a mantener y poner en valor estos parajes, especialmente las fuentes, que son ejemplos de atención pública y espacios de vida en tiempos de sequía e incendios, recordando la importancia histórica de estos puntos para los viajeros y la comunidad.