El último artesano de la Feria de la Vendimia de Toro: "Nunca más vendré a Toro, me siento defraudado"
Antonio, un espartero y artesano, quien lleva más de 10 años dedicándose a la artesanía en mercados de toda España, acudió con la ilusión de mostrar su arte en una de las citas más importantes de la ciudad. Sin embargo, su experiencia en Toro ha resultado ser una decepción mayúscula.
Antonio había acordado con la empresa concesionaria del mercado medieval un pago de 300 euros en concepto de gastos de transporte por su viaje desde Sevilla hasta Toro y viceversa. Tras montar su puesto y exponer sus productos, uno de los más visitados de la feria, llegó el momento de cobrar lo pactado. Para su sorpresa, la empresa solo le abonó la mitad del importe acordado, dejándolo a la espera del resto de su dinero, que hasta el día de hoy no ha llegado. La concesión de este mercado quizá no ha salido a concurso apuntaba Antonio, y algo huele mal ya que no hay contrato alguno con el que poder reclamar este acuerdo que creí se plasmaría a mi llegada.
Este diario ha podido hablar con Antonio, quien sigue en la localidad zamorana esperando una solución. "Me siento defraudado y engañado. Nunca me había pasado algo así en más de 10 años de mercados. Nunca más vendré a Toro", asegura con desilusión. A pesar de haber sido uno de los artesanos más destacados en la feria, su experiencia ha sido todo menos positiva.
El alcalde de Toro al que Antonio interpeló buscando una solución, y la empresa concesionaria se han mantenido al margen del asunto, sin ofrecer soluciones ni asumir responsabilidades por el incumplimiento del contrato. "Se lavan las manos", comenta Antonio, quien además ha tenido un problema mecánico con su camión, complicando aún más su regreso a Sevilla.
El caso de Antonio no es único. Otros artesanos también han expresado su malestar por la gestión del evento, lo que pone en entredicho la organización del mercado medieval en esta edición de la Feria de la Vendimia. Para Antonio, lo que debía ser una oportunidad para mostrar su trabajo se ha convertido en una amarga experiencia.
"Ojalá me pudieran ayudar, la gente de Toro no se merece esto ni yo tampoco".
Desde la organización admiten un pago de 150€ que según la responsable, y que según Sol la organizadora, el mismo artesano desdeñó en un principio y que posteriormente tras entregarle el dinero se lo devolvió airadamente. Más tarde Antonio llamó a la organizadora para que le hiciera un bizum, algo extraño y que no tiene sentido alguno pero que según la organizadora así fue. El mercado no se licitó en ningún momento y se intercabió un servicio de animación, y puestos de mercadería, con un acuerdo firmado con el Ayuntamiento de Toro, según expuso la organizadora.
Varios comerciantes se quejaron de la falta de ventas debido a la lluvia a lo que la organización también responde diciendo que el tiempo estaba como estaba y era previsible, al menos 15 artesanos no se presentaron debido a las inclemencias del tiempo, algo lógico también del lado de los mercaderes y que la organización asume siempre, las empresas musicales contratadas han cobrado y los animadores lo mismo declaró la responsable .