Toro necesitará mano de obra especializada en construcción, hasta 100 empleos en la primera oleada de la China National Building Material
China National Building Material ha comprado la antigua fábrica en Toro, la que fuera de Pevafersa, donde establecerá una planta de tecnología de la construcción que abastecerá al sur de Europa.
Desde el pasado jueves, la esperanza vuelve a reinar en Toro con mucha más fuerza ya que gracias a la firma y realidad de la compra del edificio en instalaciones de la antigua Pevafersa ve cómo una de las mayores empresas de materiales de construcción del mundo, el gigante asiático China National Building Material (CNBM), establece su cuartel general del Viejo Continente en Toro. Hasta 100 empleos en su primera oleada y con posibilidad de que sean 500 tras su asentamiento definitivo.
CNBM ha pagado por este complejo industrial, de 34.000 metros cuadrados de naves y oficinas, algo más de seis millones de euros, cifra que es solo la punta del iceberg de un proyecto mucho más ambicioso y que podrá poner a Toro de nuevo en el candelero de las oportunidades de trabajo. A este respecto el alcalde de Toro, Tomás del Bien, en declaraciones a este diario, comentaba que había otra puerta a la esperanza para la población y esperando que el trabajo realizado en silencio ahora pueda dar a Toro una nueva oportunidad de recuperar población y sobre todo oportunidades de empleo. Esto sumado a la buena noticia del viernes en relación a Monte la Reina hacen que Toro refluya y muestre su alegría teniendo en cuenta que aunque es una de las zonas más industriales aunque sea gracias a las bodegas y al aspecto agrícola que ahora también tendrá una oportunidad de recoger oportunidades dentro del mercado de la construcción.
Tecnología y Construcción los nuevos baluartes para esta empresa traerá a Toro de momento decenas de puestos de trabajo.
El gigante chino aliada de la empresa Barcelona Housing Systems (BHS), es especialista en tecnologías de la construcción. La planta de Toro construirá estructuras de acero ligero y paneles prefabricados con los que abastecer todo el sur de Europa en la construcción industrializada de viviendas.
De hecho, los dos socios prevén invertir, de forma inmediata, 15 millones de euros en acondicionar todo el complejo para poder fabricar los componentes necesarios para 500 viviendas, celeridad que responde, en parte, a que ya hay un contrato con una empresa sueca para suministrar los componentes de las primeras viviendas. Varios miembros de la empresa junto con arquitectos de la multinacional han visitado Toro durante este periodo de compra que se ha llevado de forma discreta hasta el pasado jueves cuando ha trascendido el acuerdo y la compra.
La situación de Toro, el encalve estratégico y las posibilidades de expansión han sido a demás de las facilidades dadas por el ayuntamiento toresano las cualidades que han visto desde China estos magnates de la construcción que se harán con un buen pellizco de los contratos que en España ya tienen y que verán crecer exponencialmente puesto que la construcción pasa por nuevas formas de hacer y comercializar viviendas en muchos casos prefabricadas.
Para conseguir el objetivo que es alcanzar una producción de 4.000 viviendas al año y consolidarse como referencia europea del ecosistema que se está creando en torno a la construcción industrializada de viviendas, cuyas nuevas técnicas permiten reducir los tiempos y los costes, manteniendo los nuevos estándares de sostenibilidad y eficiencia energética, el empleo tendrá que ser una de las mayores premisas. Se prevé que sean en principio 100 empleos pero el crecimiento posible alcanzará los 500 puestos de trabajo. Desde noviembre se lleva trabajando a buen ritmo para desbloquear los problams que ponían los administradores concursales de la malograda Pevafersa que será a partir de ahora un yacimiento de empleo en la comarca toresana, necesitada de oportunidades.