Toro blinda su término municipal frente a las macroplantas de biogás
El Ayuntamiento aprueba inicialmente una modificación del PGOU que limita la capacidad de estas instalaciones, fija distancias de seguridad y suspende licencias durante dos años: el cambio será debatido en el Pleno del día 30
El Ayuntamiento de Toro ha dado un paso decisivo para regular la implantación de plantas de biogás en su término municipal con la aprobación inicial de una Modificación Puntual del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), que será debatida en sesión plenaria el próximo martes, día 30. La medida busca establecer un marco claro y restrictivo que evite la instalación de macroplantas y proteja tanto a la población como al entorno natural y productivo del municipio.
Esta modificación responde al acuerdo unánime alcanzado por el Pleno municipal el pasado 30 de octubre y define las condiciones generales para autorizar este tipo de instalaciones, introduciendo límites de capacidad, distancias mínimas de seguridad y exigentes medidas ambientales y sanitarias.
Entre los principales criterios fijados se encuentra la obligación de que las plantas de biogás se sitúen a una distancia mínima de 2.000 metros del suelo urbano y urbanizable, así como de viviendas e instalaciones con presencia habitual de personas. Además, se establece una capacidad máxima de 50.000 toneladas anuales por instalación y una separación mínima de 10 kilómetros entre plantas, con el objetivo de evitar la concentración de proyectos y asegurar que su actividad se vincule al aprovechamiento de residuos locales dentro de un modelo de economía circular.
La normativa contempla también requisitos técnicos específicos, como la implantación de sistemas de confinamiento, desulfurización, monitoreo ambiental continuo y vigilancia epidemiológica, así como la exigencia de una parcela mínima de 14 hectáreas, que deberá estar legalmente constituida como parcela única.
La aprobación inicial de esta modificación del PGOU conlleva, además, la suspensión del otorgamiento de licencias urbanísticas durante un periodo de dos años para las plantas de biogás que pretendan instalarse en el término municipal, mientras se completa la tramitación definitiva del cambio urbanístico.
Queda expresamente prohibida la implantación de este tipo de instalaciones en suelo urbano y urbanizable, así como en suelo rústico de entorno urbano, asentamiento tradicional o irregular, actividades extractivas y en todas las categorías de suelo rústico protegido, incluidas las de protección agropecuaria, natural, cultural, de infraestructuras y especial. Tampoco podrán ubicarse en terrenos afectados por riesgo de inundación, quedando limitada su posible implantación únicamente al suelo rústico de uso común.
Desde el Consistorio se subraya que esta regulación persigue proteger la salud de los vecinos frente a posibles emisiones contaminantes y malos olores, así como salvaguardar el patrimonio territorial de Toro, con especial atención a los viñedos históricos de la Denominación de Origen Toro, el paisaje enológico, los ecosistemas y los recursos hídricos.
El Ayuntamiento realiza además un llamamiento a los municipios del alfoz de Toro para que adopten medidas similares, advirtiendo de que la eventual instalación de macroplantas de biogás en términos municipales cercanos, como el proyecto proyectado en Villardondiego, podría tener un impacto directo y negativo sobre la población de Toro y Tagarabuena.