Un posible caso de coronavirus en un vecino de Montamarta activa el protocolo en el HVC
El Hospital Virgen de la Concha ha activado el protocolo por un posible caso de coronavirus en un paciente residente en Montamarta, según ha confirmado el Zamora News con fuentes internas del centro. El hospital, como ya hiciera con la familia de origen italiano afincada en Vezdemarbán, ha procedido a realizarle las pruebas oportunas a la persona que podría estar afectada por el Covid-19 y está a la espera de recibir los resultados de las analíticas.
La crisis del coronavirus en España se ha agravado en las últimas horas debido a que el brote de la enfermedad ha crecido exponencialmente hasta superar el millar de contagiados y ser la principal causa de la muerte de 28 personas (si bien es cierto que todas de ellas se trataba de personas de avanzada edad, un sector de la población al que le afecta más este nuevo virus). La Comunidad de Madrid ha decidido cerrar colegios, institutos y universidades y Ciudadanos ha comunicado que aplazará su V Asamblea General.
La consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León no dará información de este caso al no haberse confirmado que paciente esté infectado por el Covid-19. La institución regional ha decidido tomar esta decisión con el objetivo de evitar que cunda el pánico entre la sociedad.
En Zamora han trascendido hasta el momento dos casos de posible coronavirus, con este tres: el de la familia italiana de Vezdemarbán -cuyas pruebas dieron negativo para esta enfermedad-, el menor que obligó a activar el protocolo en el Centro de Salud Santa Elena -al que se dio el alta tras desechar los sanitarios un posible contagio por Covid-19- y este vecino de Montamarta que presenta un cuadro sintomatológico que cuadra con la enfermedad pero que solo existe la sospecha en ningún caso hay un resultado definitivo.
Pero como siempre comentamos en nuestras informaciones de este tipo, son más de 8,5 millones de personas las que mueren por culpa de la contaminación en el mundo o más de 10.000 personas diarias mueren también de hambre, y la alerta ni asoma ni se plantea. Quizá toda esta alarma esté fundada más en criterios económicos y de miedo a lo desconocido que a lo que realmente está ocurriendo, ceirres de colegios y partidos de fútbol a puerta cerrada, decenas de ferias y mercados aplazados, cuando ya se reconoce que está creciendo el número de personas que pasan la enfermedad sin problema alguno.