La Guardia Civil investiga a un menor por conducir sin permiso en Zamora

Guardia Civil detenidos por conducir sin carnet o bajo efectos del alcohol archivo
Un menor que conducía sin carné y un conductor que dio positivo en drogas protagonizan dos graves infracciones detectadas en las carreteras zamoranas.

La Guardia Civil de Tráfico ha intervenido en dos actuaciones recientes en la provincia de Zamora, dentro de su campaña de control y prevención del consumo de alcohol y drogas al volante. Ambos casos, ocurridos los días 4 y 5 de noviembre, dejaron al descubierto conductas especialmente graves por parte de los conductores implicados.

El primer suceso tuvo lugar en la carretera N-525 (Benavente–Vigo), a la altura de Puebla de Sanabria, donde los agentes dieron el alto a un vehículo con matrícula portuguesa durante un control preventivo. El conductor ignoró las señales de los agentes y fue interceptado más adelante, en el kilómetro 56,5.

Al identificarlo, se comprobó que se trataba de un menor de edad sin carné de conducir, por lo que fue investigado por un presunto delito contra la seguridad vial. En el vehículo viajaban tres personas más, entre ellas su padre, que sabía que su hijo no tenía permiso de conducción, siendo también investigado como cooperador necesario. Ambos quedaron a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 1 de Puebla de Sanabria.

El segundo caso se registró un día después, el 5 de noviembre, en la carretera N-6 (Madrid–A Coruña). Un conductor dio positivo en anfetaminas y los agentes comprobaron que había perdido todos los puntos del carné, por lo que fue investigado por un delito contra la seguridad vial.

Durante la intervención, los agentes también identificaron a una mujer que viajaba con él y que tenía en vigor una orden judicial de búsqueda y detención por un delito de estafa. Fue arrestada y puesta a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 1 de Benavente.

La Guardia Civil recuerda que conducir sin carné o bajo los efectos de las drogas o el alcohol pone en riesgo la vida del conductor, de los acompañantes y del resto de usuarios de la vía, y puede acarrear penas de prisión de hasta seis meses, multas o trabajos en beneficio de la comunidad.