Bernardo Montoya, un criminal reincidente
El único detenido por el presunto asesinato de la zamorana Laura Luelmo ha cumplido condena por asesinato, así como su hermano gemelo y un sobrino, además de robos e intento de violación.
El presunto asesino de Laura Luelmo, Bernardo Montoya, ya está detenido. En la mañana de ayer la Guardia Civil lo detenía en la zona y posteriormente pasaba a disposición judicial por su presunta implicación en el crimen de la joven zamorana. No es la primera vez que el detenido comete un crimen que, en el caso de confirmarse su autoría, se sumaría a otros tres ocurridos en el seno de su familia, con miembros con una larga historia delictiva como los dos hermanos Montoya y un sobrino.
Según informa el Diario de Huelva, no es la primera vez que el presunto asesino de la profesora zamorana incurre en diversos delitos. De hecho, acababa de salir de la cárcel el pasado mes de octubre tras ser condenado a 22 años por el asesinato de Cecilia, una vecina de Cortegana de 82 años, en 1995.
El Diario de Huelva señala asimismo que a Bernardo lo llevaron primero ante el juez por robar y atemorizar a punta de navaja a esta anciana. El ahora detenido por el presunto asesinato de Laura Luelmo quedana entonces en libertad y a la espera de juicio al ser un delito menor y su primer encontronazo con la justicia. Una vez libre, y para evitar que la anciana declarase en el juicio, volvió a la casa y le asestó varias puñaladas, una de ellas en el cuello, mortal de necesidad.
Bernardo Montoya fue en aquella ocasión condenado y encerrado en la prisión de Huelva, pero aún así, durante un permiso penitenciario, tuvo un nuevo altercado con la justicia en El Campillo, el municipio en el que ahora presuntamente ha asesinado a Laura Luelmo. En aquella ocasión también robó a una mujer en un bar y ella lo descubrió, recriminándoselo a las afueras, momento que Bernardo aprovechó para atemorizarla con una navaja y arrinconarla para presuntamente intentar violarlala. Un oportuno perro llegó al lugar de los hechos ladrando y evitó males mayores.
Pese a su polémico pasado, Bernardo ha tenido "un buen comportamiento en la cárcel y nunca ha tenido problemas" señalan fuentes penitenciarias a Diariodehuelva.es donde incluso era utilizado como preso de confianza en algunas ocasiones, lo que le ha permitido a la postre reducir en algo su pena.
Otras fuentes penitenciarias apuntan a algo más, Bernardo, quien presuntamente asesinó a Laura Luelmo el miércoles pasado, acudió el viernes a la prisión provincial de Huelva para tener un vis a vis con una reclusa con la que mantenía una relación.
Luciano, el hermano gemelo
Bernardo Montoya tiene un hermano gemelo, Luciano Montoya. Al igual que su hermano, Luciano ha estado en la cárcel por un asesinato a una vecina de Cortegana. Esta se llamaba Mari Carmen y tenía 36 años. La abordó en un callejón oscuro y le asestó dos puñaladas, una en el cuello y otra en la cara anterior del tórax. El pasado lunes, apenas unos días después de que su hermano cometiera presuntamente este crimen, salía del penal de Ocaña (Toledo).
El crimen de Mateo Vázquez
A estos dos crímenes hay que añadir uno más con el que se ha relacionado a la familia Montoya Navarro. Así, un sobrino de los gemelos Luciano y Bernardo estuvo también sentado en el banquillo de los acusados por lo sucedido en Cortegana en la fiesta de año nuevo de 2005.
Mateo Vázquez, un disminuido psíquico de 55 años que aún vivía con su madre, cometió el error de bajarle el top a una mujer gitana en el fragor de la fiesta y en público. Al día siguiente Mateo apareció muerto y semienterrado con un cinturón en el cuello. Finalmente solo uno de los acusados, J.A.M. fue condenado y hoy día cumple condena.