Que el del Amparo te ampare, que el de la Buena Muerte te acoja, y que la Virgen de la Soledad te reconforte allá donde vayas hermano Nacho

Un especial escalofrío en la mañana de este miércoles recorría de nuevo el cuerpo de cientos de zamoranos que conocimos a Jose Ignacio Gómez Jambrina "Nacho" o "Nachete".

 Otro zamorano de pro de los que callan bajo los banzos y mantienen un especial sentimiento y de recogimiento interior. Un asiduo al pabellón Ángel Nieto para disfrutar de tardes de deporte, un hermano de acera pero sobre todo de pasos y banzos se ha ido esta mañana en una plaza que no trae buenos recuerdos a muchos de los que perdimos también al amigo Patricio.

Años atrás más de 30 hace que conocí a Nacho, un hombre peculiar y con una voz dura y cascada por el jodío tabaco y las muchas "garrasperas" de joven. Cercano, cariñoso y con un si siempre para con los de cerca, un gran tipo y mejor persona dispuesto a ayudar en todo momento y problema. La Semana Santa Santa de este 2020 tiene ya otra pérdida dura y complicada de sustituir, aunque nadie es imprescindible, como hacer para tapar el hueco de otro zamorano de los que amaban profundamente la Semana de Pasión y Zamora en toda su extensión. Se te echará en falta bajo los banzos del del Amparo, de la Soledad, del de la Buena Muerte. Y seguro que no por los cargos que ostentó sino por la calidad humana de una gran persona.

La vida no sorprende, sorprende la muerte, y la de los amigos y los cercanos, más, porque eso quiere decir que la madurez ya se asienta y tras la pérdida de los que en muchos momentos de la vida cenaron, cantaron, o trabajaron junto a uno, estudiaron o dieron algún disgusto, llega el momento de las despedidas, de esas que duelen y que dejan a la familia tocada para siempre, y a los que te tuvimos en muchos momentos cerca, pensativos. Adiós, y hasta siempre hermano Nacho, "Nachete".