La zamorana que abandonó su puesto de alta ejecutiva en Praga para entrenar la mente

Azahara Fernández durante su trabajo como líder de recursos humanos en Praga. Fotografía: CEDIDA

Azahara Fernández se marchó de Zamora a los 17 años para estudiar Filología alemana. Tras casi dos décadas entre Alemania y República Checa en los que llegó a dirigir un equipo compuesto por 258 trabajadores, ha regresado a España para fundar su propia empresa orientada al desarrollo personal

Euphloa nace con el programa 'Corta circuitos', una guía en forma de 27 audios para entrenar la mente desde casa ayudando a liberar estrés mediante herramientas de MDF, técnicas de respiración y Yoga Nidra

“Te sientes agitada, estresada, nerviosa cada día y le vas diciendo a todo el mundo: ¡Es que no tengo tiempo para nada!”. La voz de Azahara traslada un pensamiento y un ritmo de vida compartido por muchos y que ella misma sufrió durante años de estrés constante. Alejada ya de esa vorágine de pensamientos intrusivos, emplea un tono sosegado y una sonrisa alejada de los estereotipos de frialdad asociados a los altos cargos. Una calma que esconde años de trabajo al margen de su ya de por sí extenso horario laboral y que le llevó a abandonar su puesto como líder de recursos humanos en Praga.

El suyo es un testimonio de resiliencia sobre la constante búsqueda de la excelencia que le llevó a liderar un equipo de 258 trabajadores. “Durante años he estado estresada, agitada, atacada no, lo siguiente. Tenía incluso migrañas recurrentes hasta que dije: ¡Basta, si es que no puedo más!”.

Aventurera nata, abandonó Zamora a los 17 años para estudiar filología alemana en Leinpzig. De alumna a profesora, su primera experiencia laboral le ancló a las aulas de la Universidad de Masaryk en Brno, la segundo ciudad más grande de la República Checa. Desde las primeras clases de español hasta su incursión en empresas como Infosys, IBM y Honeywell -encargada de la fabricación de los motores de marcas como BMW o Mercedes, pero también de desarrollar todo el sistema de copiloto de los aviones-, el creciente nivel de exigencia y la capacidad de gestión del equipo alcanzaron cotas de infarto adueñándose de su vida más allá del plano laboral. “Fue brutal”.

Entre las noches insomnio y los ataques de estrés, fu en esa etapa cuando se encendió la chispa de su transformación personal y profesional. “Me di cuenta de que tenía que invertir en mi para poder llevar bien a todos los jefes de equipo” y, por consecuencia, a todos los trabajadores a su cargo.

Consciente de la complejidad de gestionar una plantilla tan amplia cada uno con sus propios problemas y miedos personales, Azahara se sumergió primero en el mundo del coaching para apostar finalmente por el mindfulness, más centrado en los problemas del día a día. “Empecé a formarme dentro del coaching ya que era lo que más me decía la lógica que necesitaba para llevar a mi equipo a tener los mejores resultados. Pero seguía faltando algo y es que mi equipo no sabía gestionarse emocionalmente. Al final no puedes trabajar para llegar a unas metas futuras si el presente no está asentado”.

Una evolución que combinó con su puesto de trabajo durante tres años hasta graduarse como instructora de Mindfulness, gestión emocional y psicología positiva por la Universidad de La Salle.

Azahara Fernández durante un curso de liderazgo en Honeywell. Fotografía: CEDIDA

Ahora, con su propia empresa Euphloa y de vuelta a su ciudad de origen, Azahara busca trasladar toda esa experiencia tras poner punto y final a ocho años en un puesto de excelencia. Así nace 'Corta circuitos', un programa que fusiona el yoga nidra con técnicas mindfulness.

Su voz actúa de conductora sentando una base de paz que mantiene en cada uno de los 27 audios diseñados para guiar a los participantes en un viaje de autoexploración y relajación que pueden escucharse en cualquier momento y desde cualquier rincón del mundo para adaptarse a las circunstancias particulares de cada uno. Una práctica a la que ya se han sumado personas con problemas de ansiedad o con TDAH. “Incluso hay mamás que ya se lo ponen a sus hijos de 12 años y les viene muy bien para bajar un punto de hiperactividad”. 

Más allá de ofrecer simples soluciones o técnicas superficiales, el proyecto de esta zamorana es un compromiso integral con el bienestar emocional ejerciendo de guía personal en el camino para identificar nuestras herramientas. 

Desde la gestión de emociones hasta el abordaje de relaciones tóxicas y el enfrentamiento de los miedos, el enfoque de estos audios busca capacitar a los participantes para vivir una vida ajena a los problemas diarios que engarrotan el cuerpo anulando toda capacidad de gestión operativa. 

Esos pensamientos intrusivos, los mismos que lastran y definen buena parte de nuestro día a día, son sobre los que trabaja Azahara, consiente en primera persona de la importancia de brindar una cara amable a un mundo en el que el estrés anida en cada esquina. 

Un método de crecimiento y evolución personal y profesional completamente innovador y que aspira a expandirse. “Quiero hacer un programa que englobe absolutamente todo en el ámbito del desarrollo personal”. Todo un proyecto en expansión que, de momento, puede disfrutarse con esta serie de audios y un gesto tan sencillo como darle al 'Play'. Es el primer paso para dejarse guiar en un viaje de descubrimiento profundo y transformación duradera que y se puede explorar en www.euphloa.com. Todo lo demás está por llegar (y descubrir). 

Taller de atención plena en la Biblioteca Pública. Fotografía: CEDIDA