Zamora, presente en la infancia de Arguiñano: “Unos zamoranos vivían con nosotros y todos cocinábamos en la misma cocina”

Arguiñano en su programa de Antena 3
El popular cocinero vasco ha recordado en su programa cómo, entre los 5 y los 7 años, compartió hogar y fogones con una familia zamorana en una etapa marcada por las dificultades económicas

Zamora forma parte de los recuerdos más íntimos de Karlos Arguiñano. El veterano cocinero y presentador de Antena 3 ha sorprendido a su audiencia al rememorar, en plena emisión de Cocina abierta, un episodio de su infancia ligado directamente a una familia zamorana con la que convivió durante varios años.

Lo hizo, como es habitual en él, entre receta y receta, con naturalidad y sin imposturas. “Venimos de abajo, pero venimos con fuerza”, dejó caer frente a la cámara, una frase que sirvió de hilo conductor para relatar una infancia marcada por la austeridad y la convivencia compartida. Un contexto que, según sus propias palabras, ayudó a moldear su carácter cercano y su manera de entender la vida.

Arguiñano explicó que su familia atravesó una situación económica mala, hasta el punto de tener que alquilar habitaciones de la vivienda familiar. “En mi casa teníamos pupilos con derecho a cocina”, relató, subrayando que no solo se compartían habitaciones, sino también espacios comunes como la cocina, verdadero centro de la vida doméstica.

Fue en ese contexto donde apareció Zamora en su memoria. “Una familia de Zamora vivía con nosotros cuando yo tenía de 5 a 7 años. O sea que en la misma casa vivíamos mi familia y los zamoranos”, confesó con su característico tono cercano y humorístico. Una convivencia que hoy resulta casi impensable, pero que en aquella época era una fórmula habitual para salir adelante.

Arguiñano recuerda esa etapa sin dramatismos, como parte de una infancia compartida con otras familias. Un relato que encaja con la cercanía y el trato llano que mantiene desde hace años con los espectadores de su programa.

Cuarenta años después de su debut televisivo —desde ETB hasta consolidarse definitivamente en Antena 3—, Arguiñano sigue conquistando al público no solo por sus recetas, sino por una forma de contar la vida en la que Zamora, aunque sea desde el recuerdo, también tiene su lugar.