La torre de Vega de Villalobos da "un paso gigante" hacia la esperada restauración de su espadaña

Torre de Vega de Villalobos
El Comité ‘Salvemos Nuestra Torre’ logra reunir casi 28.000 euros y ve reforzado su esfuerzo con el respaldo institucional

El pequeño municipio de Vega de Villalobos, con menos de un centenar de habitantes, tiene este año un motivo más para celebrar estos días.  La espadaña de su iglesia parroquial ha sido incluida en el Convenio de bienes inmuebles 2026-2027 firmado entre la Diputación de Zamora y el Obispado, una noticia que ha sido recibida con “tremenda satisfacción” por el Comité Salvemos Nuestra Torre (SNT), impulsor de la iniciativa ciudadana que busca restaurar el emblemático elemento del templo.

Muchas veces nos dicen que somos un ejemplo para la provincia, y quizá sea exagerado, pero ver cómo un pueblo tan pequeño es capaz de unirse para algo así es extraordinario”, expresaron desde el comité, que celebra la noticia como “un paso de gigante” en un proyecto que ahora se convierte también “en común con Diputación y Obispado”.

Desde finales de 2024, el colectivo mantiene una campaña de recaudación de fondos que, a base de actividades culturales, donaciones vecinales y la implicación de asociaciones locales, ha conseguido reunir 27.844 euros hasta octubre de 2025. Una cifra “récord”, según el propio comité, que ha permitido visibilizar la importancia de esta torre para el pueblo, considerado por sus vecinos como un verdadero símbolo identitario.

Aunque la torre de la Iglesia de San Román no cuenta con protección como Bien de Interés Cultural, los informes técnicos alertan de un deterioro grave en la estructura. Una memoria elaborada por el Obispado cifró en unos 55.000 euros el coste estimado de su restauración, una cantidad que podría incrementarse con el paso del tiempo.

El proyecto ha contado con la colaboración de numerosos vecinos, artistas y escritores con raíces en la localidad, así como del Club de Cazadores y otras asociaciones. “27.844 veces gracias”, resumieron desde el comité, que destaca que “cada pequeño gesto, cada euro y cada iniciativa han sido esenciales para llegar hasta aquí”.

La inclusión de la espadaña en el convenio provincial "es una recompensa al esfuerzo colectivo y una prueba de que el trabajo duro da sus frutos”, concluyen los impulsores de esta iniciativa que ha devuelto la ilusión y la unidad a un pueblo pequeño, pero con una fe, y una torre, muy grandes.