La peregrinación jacobea se estabiliza tras tres años aciagos

Peregrinos por el Camino Sanbrés. Foto Albergue Tábara

Los datos al cierre del ejercicio de 2023 siguen la tendencia de otros años; el número de peregrinos se ha estabilizado respecto al 2019, manteniendo unas cifras similares en todos los caminos que pasan por nuestra provincia

En cuanto a la procedencia, el 66,27% son extranjeros, sobre todo alemanes, y los restantes del mapa nacional con especial incidencia entre los andaluces y castellanoleoneses

Cuando hace ya casi cuatro años el mundo se detuvo como consecuencia del Covid-19, también el Camino se vio inmerso en una paralización que, a lo largo de su historia de casi 1200 años, nunca había conocido. Ese lapso de dos años entre confinamientos y restricciones trazó un complicado sendero de recuperación del tránsito habitual con un esperado Año Santo en 2021 que resultó "aciago para la peregrinación" con un descenso generalizado. 

La Asociación Zamorana de los Caminos de Santiago ha recordado otras dificultades sobrevenidas como la ola de calor de mediados de 2022 y el desastre natural tras los incendios de la provincia "que motivó que muchos de ellos desistieran caminar por rutas que habían perdido todo su encanto natural". Todo ello se tradujo en un descenso que hace dos años aún se fijaba en un 18%. 

Afortunadamente, los datos al cierre del ejercicio de 2023 revelan que el número de peregrinos se ha estabilizado respecto al 2019, manteniendo unas cifras similares en todos los caminos que pasan por nuestra provincia.

Con respecto a las características y origen de los peregrinos, el 72,32% de los peregrinos son hombres y el restante 27,58% son mujeres. En cuanto a la forma de recorrer el Camino, el 88,70% lo hace a pie y el 11,19% en bicicleta. Es también significativa la tendencia al alza de peregrinos de avanzada edad, ya que el 50,51% son mayores de 60 años.

En cuanto a la procedencia, el 33,73% son españoles, siendo la comunidad de Andalucía la que mayor número aporta, con un 6,84% y, en segundo lugar, Castilla y León, con un 3,73%. Este dato sorprende, por cuanto no es muy habitual que peregrinos recorran caminos de su propia comunidad. Sobre los extranjeros, decir que representan el 66,27% del total, siendo Alemania, con un 11,86%, el país que mayor número de peregrinos aporta, seguida de Francia, con un 11,07%, e Italia, con un 10,96%.

Por estos caminos transitan peregrinos de todo el mundo: en el 2023 han recorrido la Vía de la Plata y el Camino Sanabrés peregrinos de 55 países, algunos tan significativos y curiosos como Vietnam, Ucrania, Malasia, Bielorrusia, China o Perú. Son peregrinos de “largo recorrido”, ya que el 46,44% comenzaron en Sevilla, siguiéndole en segundo lugar Zamora, con un 12,77%, y Granja de Moreruela se posiciona en tercer lugar con un 10,95%.

Si bien desde la Asociación aseguran que estos buenos datos no deben ocultar la situación endémica que atraviesan nuestros caminos, especialmente estos dos citados, la Vía de la Plata y el camino Sanabrés, que son los más concurridos, porque de tener una afluencia de más del 5% con respecto al total de peregrinos que llegaban a Santiago. De hecho, en los últimos 20 años el flujo ha descendido a poco más de un 2%, pasando del tercer lugar en preferencia a la hora de elegir una de las rutas jacobeas, al séptimo que ocupamos en la actualidad.

Algo que achacan a "una mala planificación y una mala gestión de nuestros Caminos de Santiago, y aquí todos somos responsables, desde las asociaciones hasta las administraciones públicas, que son las que deberían velar por el aprovechamiento y puesta en valor de este rico patrimonio, heredado a lo largo de 12 siglos de historia", apuntan.

Recuerdan así algunas actuaciones que se han realizado últimamente, que no se corresponden con el compromiso que en las diferentes ferias y certámenes turísticos nuestros dirigentes promocionan. "Se han señalizado algunos caminos colocando los mojones de orientación para el peregrino donde no son necesarios; recientemente, se han instalado unos bancos para descanso del peregrino en aquellos lugares en los que no se necesitan, porque en los pueblos donde se han puesto hay ya suficientes bancos y no así en tramos largos del camino, donde el peregrino no tiene ningún sitio en el que poder sentarse".

Desde la Asociación lamentan también el no cambio de señalética realizada ante las obras del Puente de Piedra o "no confiar en los zamoranos para la gestión del albergue de Zamora", que podía dinamizar a todos los de la provincia, cuando los albergues  “Castrotorafe”, en Fontanillas de Castro y “Los Beatos” en Tábara, en la Vía de la Plata y en el Camino Sanabrés, respectivamente, son los más valorados de esas rutas jacobeas por los peregrinos, ambos gestionados por la Asociación Zamorana de los Caminos de Santiago.