Denuncian el grave deterioro de dos carreteras en Zamora tras más de una década de abandono
La Unión Internacional para la Defensa de los Motociclistas (IMU) ha interpuesto dos denuncias ante la Dirección General de Tráfico por el deterioro grave de dos carreteras en la provincia de Zamora: la que conecta El Perdigón con la A-66 y la que une Casaseca de las Chanas con Cazurra. La plataforma ciudadana acusa a las administraciones responsables de incumplir la ley durante más de una década, poniendo en riesgo la vida de los usuarios.
Según los informes registrados los días 3 y 4 de junio de 2025, la situación en ambas vías es crítica. En el caso del tramo entre la A-66 y El Perdigón, se denuncia la presencia de guardarraíles rotos, áridos sueltos sin señalización, marcas viales borradas, estrechamientos no señalizados, hierba creciendo en el asfalto y una señalización vertical deteriorada o inexistente. Todo ello, expone la IMU, configura un escenario con alto riesgo de salidas de vía, colisiones frontales y lesiones graves en caso de accidente.
La organización advierte de que el mal estado de esta carretera no es nuevo. Asegura que “en junio de 2025 se observan las mismas deficiencias e ilícitos que en años anteriores”, lo que, en su opinión, evidencia un abandono sistemático y un incumplimiento prolongado de la normativa de seguridad vial.
Una situación similar se denuncia en la ZA-L-2107, la carretera que conecta Casaseca de las Chanas con Cazurra. El firme está muy degradado, con tramos descarnados y llenos de áridos incluso en curvas, lo que, unido a la falta de balizamiento, señalización y anchura adecuada, convierte el trazado en “una trampa mortal”, según la plataforma. Además, se critica que la señalización existente es “inexistente o inservible”.
Ambas denuncias han sido dirigidas al Director General de Tráfico, a quien se solicita que actúe con urgencia y aplique las medidas que la ley permite, incluida la posibilidad de cerrar las carreteras si no se garantiza la seguridad. También se reclama el traslado del informe a la Fiscalía de Seguridad Vial por un posible delito recogido en el artículo 385.2 del Código Penal, al considerar que se ha puesto en peligro la vida de los ciudadanos durante más de 10 años.
La IMU insiste en que la DGT tiene la responsabilidad de vigilar y garantizar la seguridad de las vías, igual que se exige a los conductores mantener sus vehículos en condiciones. “No entendemos cómo pueden mirar hacia otro lado ante una situación tan grave”, concluye la organización, que ha aportado pruebas gráficas y videográficas para apoyar sus denuncias.
Los informes están incluidos en el Programa Ciudadano de Control del Estado de las Carreteras, que la IMU impulsa desde Zamora y con el que pretende que se cumpla la ley “sin excusas”. La plataforma también exige que se incremente el presupuesto destinado al mantenimiento de estas vías convencionales, cuyo estado, aseguran, refleja “una falta de ética, de responsabilidad y de respeto hacia la seguridad de todos los ciudadanos”.