¿Por qué no hay que doblar las gomas de la mascarillas?
La mascarilla forma parte de nuestro atuendo desde que se inició la pandemia. Su uso protege del virus, algunas incluso garantizando una filtración bacteriana superior al 95%, como es el caso de las FFP2. Pero casi un año después, hay quien todavía no las utiliza correctamente, poniéndose en peligro él y los que se encuentran a su alrededor. RTVE, junto al colaborador e investigador de cabecera, José A. López, repasa uno de los errores más extendidos: doblar la goma a las mascarillas.
Todos nos hemos fijado en personas que llevan la goma de sus mascarillas doblada en forma de ocho. Buscan una mayor sujección o comodidad a la hora de llevar la protección durante muchas horas. Pero es un error. El agarre puede provocar que la mascarilla se abra por los laterales, perdiendo efectividad y estando más expuestos al virus.
"Los expertos en mecánica de fluidos afirman que con el 5% de apertura que tiene al hacer esta modificación, se puede generar el 90% de pérdida de aerosoles", confirma José A. López en RTVE.
Lo ideal sería ponérsela tal y como indica el fabricante, para evitar que tengamos que manipular la mascarilla y que pierda efectividad. José A. López recuerda que "existen diferentes tallas de mascarillas", por sí la que lleva no se adapta lo suficientemente bien a la cara del usuario.
Es mejor adquirir otra talla que intentar manipular las gomas o cualquier otro elemento de las mascarillas. El investigador también ha recordado que es conveniente no superar el tiempo de uso de los métodos de protección más allá de lo recomendado por el fabricante.
Fuente: RTVE