Ambos, son muy diferentes, puesto a que están enfocados de manera distinta. Por ejemplo, el normal, va enfocado a lo cotidiano o rutinario, y el de negocios a lo que puede suceder en una compañía. Además, tiene una gramática y vocabulario muy específico, entre otros puntos a destacar.

Es por ello que, aprenderlo correctamente de la mano de profesionales como American Language Academy, te permitirá dominarlo según el espacio en el cual te encuentres.  Diferencias entre el inglés de negocios y el inglés normal

Las diferencias abarcan diversos aspectos como el vocabulario y la gramática, entre otras que mencionaremos a continuación:

• Formalidad:

El normal puede ser más informal, con uso común de contracciones y un tono más relajado. En cambio, el otro es más formal, se evita usar las contracciones y se usa un tono respetuoso y profesional.

• Vocabulario específico:

El común es de uso cotidiano en donde se emplean palabras y expresiones más habituales, pero el otro, emplea términos técnicos.

• Estructura gramatical:

En el normal, se observa una mayor flexibilidad en la estructura de todas las oraciones. En el caso contrario, se convierte en una prioridad la claridad y brevedad. Por lo tanto, las estructuras de las oraciones suelen ser más directas.

• Correos electrónicos:

Puede ser más informal y directo cuando se trata del común, pero en los negocios se cuidan muchos los detalles en cuanto a la estructura formal y a la claridad del mensaje que se quiere transmitir.

• Presentaciones y reuniones:

Cuando se trata de lo habitual, es menos estructurado y, por lo tanto, con mayor libertad en la expresión. Pero si es más profesional, a nivel laboral, las presentaciones adquieren mayor formalidad.

¿Qué es el inglés de negocios y por qué es importante aprenderlo?

El inglés de negocios o "Business English" es una variante del idioma diseñada específicamente para su uso en contextos empresariales y profesionales. Se centra en la comunicación efectiva en situaciones laborales, como, por ejemplo, una reunión, presentaciones de algún proyecto, negociaciones, entre otros. Por todo esto y más es importante dominarlo.

• Facilita la comunicación global al permitir la comunicación con colegas, clientes y socios comerciales, sin importar el país en el cual se encuentren.

• Muchas compañías, especialmente aquellas que hacen operaciones globales, valoran esta habilidad al contratar a sus futuros empleados. Además, la capacidad de comunicarse correctamente en este contexto es un activo para ascensos y oportunidades laborales.

• Este proporciona las herramientas lingüísticas necesarias para expresar ideas de manera clara, persuadir y llegar a acuerdos beneficiosos para todas las partes que se encuentren involucradas.

• Se adapta a diversas situaciones empresariales, desde la comunicación diaria en la oficina con los compañeros de trabajo o del equipo, hasta eventos internacionales. Su aprendizaje permite sentirse más cómodo y competente en muchos sentidos.

 Ventajas del inglés en los negocios

Más allá de dominar el idioma para situaciones normales de la vida, se puede usar para acuerdos de negocios. Por ello, adquirir esta destreza es algo que no tiene precio, por sus muchos beneficios. Además, con los cursos de inglés online, ahora es más accesible que nunca

• Permite una comunicación clara y efectiva en contextos empresariales. Gracias a ello, se facilita la transmisión de ideas, información y negociaciones en general.

• Facilita la participación en la economía global al proporcionar acceso a recursos, información y oportunidades de negocios en cualquier lugar del mundo.

• Mejora la competitividad en el mercado laboral al ser una habilidad muy valiosa. Como hemos mencionado, es muy requerida por empleadores en las empresas.

• Ayuda a la colaboración con colegas, clientes y socios de diversas culturas. Gracias a ello, se fomentan las relaciones comerciales sólidas.

• Permite la construcción de una red profesional más amplia y diversa, debido a que facilita la interacción con profesionales de diferentes partes del mundo.

• Hace más fácil la comprensión de información especializada y el uso de términos técnicos en áreas como finanzas, tecnología, marketing, entre otras.

• Mejora la movilidad laboral, puesto a que permite trabajar en diferentes países del mundo y adaptarse a distintos entornos laborales.