Aceite más caro en envases más pequeños
Una práctica peculiar está marcando la venta de aceite de oliva virgen extra en los principales supermercados españoles. Según un análisis de FACUA-Consumidores en Acción, las cadenas más grandes del país venden el formato de 750 mililitros de sus marcas blancas a precios más altos que las botellas de un litro, pese a contener menos producto.
En Mercadona, el litro de aceite virgen extra de la marca Hacendado cuesta 6,75 euros, mientras que la botella de 750 mililitros asciende a 6,95 euros, 20 céntimos más cara pese a contener 250 mililitros menos. Situaciones similares se repiten en Alcampo (6,74 euros el litro frente a 6,95 euros el formato pequeño), Eroski (6,75 euros el litro y 6,95 euros los 750 ml) y Carrefour (6,74 euros y 6,95 euros, respectivamente).
Otros supermercados como Dia y Hipercor también reflejan esta tendencia. En Dia, el envase de 750 mililitros se comercializa a 6,99 euros, superando en precio al de un litro, que cuesta 6,89 euros. En Hipercor, el litro de la marca El Corte Inglés cuesta 6,89 euros, mientras que el formato de 750 mililitros se vende por 6,95 euros.
FACUA señala que el aceite contenido en ambos formatos es idéntico. La diferencia radica en el tipo de envase, siendo las botellas de un litro de plástico y las de 750 mililitros, de cristal. Este último tipo de envase se popularizó durante los meses de mayor carestía del aceite de oliva, cuando algunas cadenas, como Mercadona, retiraron temporalmente el formato de un litro de sus estanterías.
Además, ante el aumento de los precios, otras cadenas optaron por sustituir las tradicionales garrafas de 5 litros por envases de 3 litros.
Aunque el precio del aceite de oliva ha bajado ligeramente en las últimas semanas, los consumidores siguen enfrentándose a esta curiosa disparidad en los formatos. FACUA, que monitoriza a diario los precios de estos productos en su web, denuncia que esta estrategia puede confundir a los compradores menos atentos y anima a elegir el formato que resulte más rentable.
La organización también recuerda que el consumidor tiene derecho a estar informado de manera clara y transparente sobre los precios y las diferencias entre los productos que adquiere, instando a los supermercados a corregir esta disparidad.