Treinta y tres años después, hoy recordamos la catástrofe de Chernóbil, ocho millones y medio de personas estuvieron expuestas a la radiación
En 1986 una explosión en la central nuclear de Chernóbil propago una nube radioactiva en gran parte de lo que fue la Unión Soviética y que ahora son los territorios de Belarús, Ucrania y la Federación de Rusia. Casi 8.4 millones de personas en los tres países fueron expuestas a la radiación. La energía nuclear sigue siendo un verdadero problema que volvió a tener sus consecuencia años después con Fukusima en 2011. El hombre no es capaz de cotrolar la naturaleza y la reacción en cadena que puede suponer un accidente como cualquiera de los ocurridos podría hacer desaparecer a la humanidad, pero seguimos jugando con fuego.
Lo increible es que el gobierno soviético reconoció la necesidad de la ayuda internacional sólo en 1990. Ese mismo año la Asamblea General adoptó la Resolución 45/190 , llamando a «la cooperación internacional para abordar y mitigar las consecuencias de la planta nuclear de Chernóbil». Ese fue el comienzo de la participación de las Naciones Unidas en la recuperación de Chernóbil. El grupo de trabajo interinstitucional fue creado para coordinar la cooperación de Chernóbil. En 1991 la ONU creó el Fondo Fiduciario para Chernóbil, en la actualidad bajo la dirección de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) Disponible en inglés. Desde 1986, el sistema de las Naciones Unidas y las principales ONG han puesto en marcha más de 230 diferentes estudios y proyectos Disponible en inglés de asistencia en los ámbitos de salud, seguridad nuclear, rehabilitación, medio ambiente, obtención de alimentos limpios e información.
En 2002 las Naciones Unidas anunció un cambio en la estrategia de Chernóbil, con un nuevo enfoque en el desarrollo a largo plazo. El PNUD y sus oficinas regionales en los tres países afectados tomaron la delantera en la aplicación de la nueva estrategia. Todavía hay mucho trabajo qe que hacer en la región afectada. Para prestar apoyo a los programas internacionales, nacionales y públicos dirigidos al desarrollo sostenible de estos territorios, en 2009 la ONU presentó la Red Internacional de Investigación e Información sobre Chernobyl. Las consecuencias de Chernóbil seguirán en el futuro. El trabajo de la comunidad internacional no ha terminado todavía.
El 8 de diciembre de 2016, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó una resolución que designaba el 26 de abril como el Día Internacional de Recordación del Desastre de Chernóbil. La Asamblea General reconoció que «Chernóbil 30 años después: de la emergencia a la recuperación y el desarrollo económico y social sostenible de los territorios afectados», e invitó a «todos los Estados Miembros, los organismos competentes del sistema de las Naciones Unidas y otras organizaciones internacionales, así como a la sociedad civil, a que celebren el día».
No sería un día de celebra si las medidas de seguridad se hubieran adoptado tal y como se suponen hoy en día, pero... ¿creen que estamos libres de otro desastre nuclear?