Sardinas en lata, ¿transporte público seguro? 10 a cenar en Navidad, pero 20 en el bus ojo

Ni aforos medidos, ni medidas aforadas, ni siquiera distancias de seguridad, la tercera ola será por tanto una realidad en enero.

Así, en esta tesitura se mantenían hoy los transportes públicos en la capital. Con la calefacción a tope sin ventilación advertida y con todos los asientos copados, más de 20 personas en una lata con el agravante de que el transporte público en la capital es el más utilizado por las personas mayores.

Las medidas de la JCYL afectan a todos en igual medida y tanto los aforos como los toques de queda, lo que no queda tan claro es el tema del transporte público, da igual el urbano en bus que el que sufrirán los que viajen en Navidad en AVE Alvia o como queramos llamarlo. 

No hay medida no tenemos conciencia de grupo y tampoco responsabilidad, o al menos esto cuenta esta instantánea que es parte de muchas que tenemos a diario. La limitación de aforo para muchos locales, al 30% para los cines, para los hosteleros, pero esto del transporte público tiene punto y a parte. No habrá tampoco San Silvestres, pero este deporte el del enlatado en el autobús es otra cosa. Las limitaciones de aforo se cumplirán no lo discutimos, pero en este espacio no hay ni metro y medio entre viajeros y no hay que juzgar solo mirar para decidir que puede pasar aquí.

No es de juzgar repetimos, es simplemente cosa de sentido común, las lamentaciones llegarán más adelante cuando el virus haya vuelto en enero y entonces las medidas de relajación no tengan amigos.