Miles de zamoranos honran al "Cristico"

El buen tiempo favorece una masiva afluencia de romeros a la ermita de Valderrey

Miles de zamoranos acuden hoy a la ermita del Cristo de Valderrey para cumplir con la primera gran cita romera del año. A las nueve y media de la mañana salía en procesión la imagen del "Cristico" desde la iglesia del Espíritu Santo hacia la ermita, atravesando el bosque de Valorio. Tras la misa de las 12 horas, la imagen ha salido en procesión para la tradicional bendición de campos. Ya a la una ha tenido lugar la misa al aire libre, con un nuevo sistema de megafonía, a la que se han sumado cientos de romeros animados por el sol y el buen tiempo.

Ya desde ayer, día de vísperas, numerosos zamoranos se han dado cita en la ermita y en las casetas instaladas en la pradera para cumplir con la tradicional cita romera que abre la Pascua en la capital. El sonido de dulzainas, redoblantes, gaitas, panderetas y flautas y tamboriles anima la jornada, en la que miles de zamoranos acuden a honrar al Cristico de Valderrey, una de las imágenes de mayor devoción popular de la capital.

Eran las nueve y media de la mañana y el Cristo salía desde la iglesia del Espíritu Santo en procesión hacia la ermita, atravesando el bosque de Valorio a hombros de sus cofrades, que lucen medalla plateada con cordón morado. Allí la cofradía ha agradecido a Antonio y Paqui, propietarios de una de las casetas, su colaboración con la hermandad, a la que siempre convidan a desayunar a su paso por el bosque. Ya en las casas de la carretera de Valderrey la cofradía ha ofrecido a los hermanos y devotos que acompañaban a la imagen un chocolate con churros para templar la mañana, mientras el sol asomaba por las lomas de Valderrey anunciando un día romero y festivo.

En la pradera, además de las casetas, permanecen instalados numerosos puestos de ventas de rosquillas de aire y avellanas, tan tradicionales en las romerías zamoranas, además de golosinas y juguetes para niños. El buen tiempo ha favorecido una numerosa afluencia de zamoranos a la ermita, donde a las doce de la mañana tenía lugar la misa solemne de mayordomía, con la presencia de representantes de las administraciones locales, provinciales y regionales, a la que ha seguido la procesión con la bendita imagen, que año tras año sale a bendecir los campos para prometer una buena cosecha.

Ya a la una ha tenido lugar una segunda misa, esta vez al aire libre para favorecer una mayor participación de los romeros, que un año más han demostrado la devoción que sienten los zamoranos por este pequeño crucificado gótico al que muchos besan y acarician los pies ocultos bajo el faldón de terciopelo carmesí.

Zamora ha cumplido su primera gran cita romera y ha honrado al Cristico, sobrenombre cariñoso que recibe el Cristo de Valderrey, una de las advocaciones más queridas de la ciudad. Ahora ya sólo resta esperar a que amanezca Lunes de Pentecostés y la ciudad acompañe a su Patrona a La Hiniesta, para convetir de nuevo Valorio y la pradera de Valderrey en una cita festiva y devocional con siglos de historia y tradición.