El aceite y el pan tradicional protagonizan nuevas jornadas en Latedo
El presidente de la Diputación de Zamora, Javier Faúndez Domínguez, ha presentado la decimonovena edición de las Jornadas de producción artesanal de aceite de oliva y elaboración de pan en horno tradicional en Latedo, una localidad del municipio de Trabazos. Tras dos años de interrupción por la pandemia, las jornadas regresan este año para poner en valor técnicas ancestrales de producción artesanal y el patrimonio cultural de la zona.
Todo comenzó hace más de 20 años con la rehabilitación del antiguo lagar de aceite comunitario del pueblo, un proyecto que buscaba recuperar el aceite como recurso económico y social para las familias de Latedo. Con el paso del tiempo, también se rehabilitó el horno de pan de la Tía Emilia y el molino harinero, completando los tres elementos arquitectónicos esenciales para estas jornadas.
El evento, que se celebra el 7 de diciembre, combina demostraciones prácticas y actividades culturales. Los visitantes podrán ver en funcionamiento la lagar de aceite durante todo el día, asistir a talleres de cata de aceite impartidos por expertos de la asociación Olearum, y participar en talleres de elaboración de pan en horno de leña, pensados tanto para adultos como para niños.
Además, el programa incluye una degustación de cocido tradicional alistano, previa reserva, y una merienda con pingadas de aceite y miel, todo amenizado por música tradicional de la comarca. Según Faúndez, estas jornadas no solo buscan poner en valor la tradición, sino también transmitir a las nuevas generaciones el proceso ancestral de producción de aceite y pan, tal como se hacía en siglos pasados.
El organizador del evento, Carlos Blanco, destacó el orgullo de los vecinos por recuperar la historia y las tradiciones de Latedo, mientras que Faúndez recordó los reconocimientos obtenidos por la localidad y premios fotográficos de relevancia nacional.
Aunque la producción actual es limitada y destinada principalmente al consumo familiar, la actividad mantiene un valor cultural, etnográfico y simbólico, mostrando la importancia de la agricultura y ganadería local. Durante las jornadas, el pequeño pueblo de Latedo se llena de visitantes de toda España e incluso del extranjero, consolidando este evento como una celebración comunitaria y turística de primer nivel en la provincia de Zamora.