Condenadas a once y nueve meses de prisión por ocultar un criadero ilegal de venta de Yorkshire
El juez ha considerado que ambas hermanas eran plenamente conscientes de la situación ante las trabas que pusieron a la policía para que accedieran al local
En el interior se encontraron medio centenar de ejemplares hacinados en espacios minúsculos como cajas de cartón y en condiciones deplorables
El Juzgado de lo Penal número 3 de Valladolid ha dictado sentencia condenando a dos hermanas a penas de prisión de once y nueve meses, respectivamente, por un delito continuado de maltrato animal, consecuencia del criadero ilegal de Yorkshire que ocultaban en un local de la ciudad vallisoletana y que la Policía Municipal de Valladolid descubrió en abril de 2020.
El juez ha considerado que ambas hermanas eran plenamente conscientes de la situación ante las trabas que pusieron a la policía para que accedieran al local. Una de las hermanas ha obtenido una condena menor al aplicársele el atenuante de alteración mental. El magistrado también ha impuesto a las dos la inhabilitación por dos años para el ejercicio de cualquier oficio, profesión o comercio que tenga relación con los animales y para la tenencia de los mismos al tiempo que deberán desembolsar en concepto de indemnización conjunta y solidaria al Ayuntamiento con un total de 14.559 euros.
Los animales permanecían ocultos en la zona trasera del local en cubos y cajas de cartón "en total ausencia de higiene y las mínimas condiciones de habitabilidad animal". Pese a ello, la declaración de una de las acusadas aseguraba que los animales podían estar sucios, pero en ningún caso desnutridos. También alegan que, aunque carecían de microchip, estaban vacunados y desparasitados y justifican los hechos como "Un cúmulo de infortunios".
Fue una vecina la que puso en conocimiento de la Policía la situación ante los continuos ladridos y el hedor que salía del local desde hacía ya más de un mes. Si bien en un principio una de las hermanas mostro sólo a tres cachorros hacinados en un transportín lleno de excrementos y orines, los agentes encontraron a medio centenar de perros, así como los cuerpos de un mayo y el feto de una de las hembras.
Durante las posteriores investigaciones se comprobó las consecuencias derivadas del hacinamiento y falta de salubridad de los animales en forma de ausencia de piezas dentales, dermatitis, gingivitis, otitis, cataratas, úlceras corneales cicatrizadas, desnutrición, atonía muscular y atrofia por la privación de movimiento.
La sentencia, desvelada por Europa Press, revela que "las acusadas han reiterado que todo lo hicieron por el bienestar de sus perros, pero la realidad es tozuda y la prueba contundente, hablar de cuidado, atención, dedicación y ausencia de dolo cuando día a día podían advertir el progresivo deterioro físico de sus animales, apreciable a simple vista".