La biorrefinería de Barcial recibe la autorización ambiental

Manifestación celebrada en febrero para que se desbloqueara el proyecto de la biorrefinería.

La planta de cogeneración con gas natural que se pretende construir en Barcial del Barco ha recibido una autorización ambiental actualizada por parte de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente de la Junta después de que el proyecto promovido inicialmente por Iberdrola haya sido retomado ahora por un grupo un ingenieros como una biorrefinería multifuncional.

El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Antonio Silván, publicó en el Boletín Oficial de Castilla y León una orden por la que actualiza la autorización ambiental concedida en el año 2010, aunque adaptándola a la nueva normativa.

La actualización, con efecto desde el 7 de enero de 2014, conlleva cambios sobre la protección de las aguas subterráneas y
superficiales. Así, los productos químicos que se encuentren en fase líquida, deberán ubicarse sobre cubetos de seguridad que garanticen la recogida de posibles derrames y los sistemas de contención no podrán albergar ningún otro líquido. Además, los sistemas de desagüe de los cubetos permanecerán siempre cerrados y periódicamente se efectuará un control sobre su adecuado funcionamiento, estanquidad de la llave de cierre y funcionamiento.

El programa de mantenimiento, que debe estar redactado en un plazod e tres meses a partir de la notificación de la nueva autorización ambinetal, incluirá, al menos, una inspección anual, que asegure la impermeabilización y estanqueidad
de recipientes, conductos y del pavimento en las zonas de generación y almacenamiento y uso de productos químicos. El plan de seguridad conllevará la redacción de protocolos de actuación, en caso de posibles derrames o fugas de sustancias químicas en la instalación. "Cualquier derrame o fuga que se produzca, de tales sustancias, deberá recogerse inmediatamente, y el resultado de esta recogida se gestionará adecuadamente de acuerdo a su naturaleza y composición", señala la orden por la que se actualiza la autorización ambiental de la planta.

Además, en el plazo máximo de 6 meses, desde la notificación de la actualización de la autorización ambiental, se deberá presentar un plan de control del suelo y las aguas subterráneas para garantizar que no se producen filtraciones.

En el supuesto de que se produzca cualquier derrame o fuga accidental que pudiera dar lugar a la contaminación del suelo o las aguas subterráneas el titular de la instalación deberá realizar una caracterización analítica del suelo en la zona potencialmente afectada en el plazo de tres meses desde que se detecten el derrame o fuga accidental.


La instalación deberá determinar cuáles son sus períodos de arranque y paradaminetras se efectúen trabajos de mantenimiento y limpieza deberá asegurarse en todo momento, el control de los parámetros de emisión a la
atmósfera.

La actualización de la autorización ambiental y las prescripciones que contiene pueden ser recurridas en el plazo de un mes en la vía administrativa y de dos si se decide acudir a la vía judicial.

El proyecto de la biorrefinería se calcula que puede general 65 empleos directos, cientos de indirectos. La inversión prevista en la construcción y puesta en marcha de la planta está previsto que supere los 100 millones de euros.