Bordils despacha al Balonmano Zamora en 20 minutos
El Balonmano Zamora Rutas del Vino cayó en casa del Handbol Bordils 29-21 en un encuentro que se decidió en los primeros 20 minutos. Los de Leo Álvarez realizaron un partido bastante decepcionante en ataque y muy precario en defensa. Gastón Mouriño fue de lo poco potable de los Guerreros de Viriato, los cuales en la jornada de este domingo estuvieron muy poco batalladores y tiraron la toalla cuando todavía faltaba más de medio partido por disputar.
El conjunto zamorano entró bien en el encuentro, incluso abrió la lata con un siete metros correctamente ejecutado por Ramiro. El extremo argentino estaba fino y pronto convirtió su segundo gol para colocar el 2-3 a favor de los pistachos. Con este marcador, el Bordils cerró filas y dificultó las conexiones con los extremos provocando un par de pérdidas de balón del joven central Aravena. Los catalanes aprovecharon los contraataques para ponerse dos arriba en el electrónico (5-3).
Cuando Jortos o Sarasola no pisan la cancha, el Balonmano Zamora carece de amenaza en el lanzamiento exterior y sus ataques se vuelven planos y predecibles. Esto, sumado a las ya conocidas dificultades de Cubillas para conseguir ser efectivo en el uno contra uno (hasta dos mano a mano falló en los primeros minutos) lastró la fase ofensiva del Rutas del Vino, que se dejó ir hasta el 7-3 encajando un parcial de 5-0.
A cinco minutos para el descanso el Bordils dominaba el partido con una holgada ventaja de 11 tantos a favor y tan solo seis en contra. La escuadra local atacaba a placer, los pivotes catalanes penetraban la defensa pistacho como el cuchillo se hunde en la mantequilla. Si los de Leo Álvarez estaban poco imaginativos en ataque, en defensa eran un auténtico drama. Ramiro, que había fallado su segundo lanzamiento desde los siete metros, parecía desconectado y solo otro argentino, el pivote Gastón Mouriño, sostenía al Cuadro de Viriato. A pesar de los esfuerzos del jugador pretendido por Ciudad de Guadalajara, el partido llegó al descanso 14-9 y con la sensación de que la diferencia podría haber sido mayor si el Bordils hubiera querido.
Sin reacción en la segunda parte
Bordils ganó el partido en 20 minutos, el resto fue un mero trámite -una fiesta para la afición local- en el que el Balonmano Zamora ofreció una imagen muy pobre en las dos áreas. Leo Álvarez se desgañitaba en la banda, pero su equipo no paraba de encajar (19-13 con todavía 20 minutos por disputar).
El resto del partido se desarrolló por unos cauces similares. Farrarons, Palahi y Canyigueral, con cinco tantos cada uno, fueron los principales artífices de la victoria del Bordils, que finalmente fue por un resultado de 29-21. El Balonmano Zamora continúa con muchas dificultades para sumar fuera.