Tábara vuelve a alzar la voz por la sanidad pública: “Sin lucha, no hay futuro”

ZBS Tábara
Desde la Plataforma se hizo un llamamiento a la unión de todas las zonas básicas de salud en defensa del bien común: “Un sistema público reforzado, con profesionales sanitarios bien tratados y condiciones laborales dignas”

Un sábado más, la Plataforma Sanitaria de Tábara ha salido a las calles del municipio para alzar la voz en defensa de la sanidad pública, denunciando el progresivo deterioro del sistema sanitario, especialmente en lo que respecta a la atención primaria en el mundo rural. La movilización forma parte de una constante reivindicación ciudadana que no cesa, ni en verano ni en invierno, en su lucha por un modelo público justo y equitativo.

Durante la concentración de esta semana, la Coordinadora de las Plataformas en Defensa de la Sanidad Pública en Castilla y León ha lanzado un mensaje claro: “Hay que volver a salir a la calle en octubre”. Denunció la paulatina “liquidación del sistema sanitario público” y alertó sobre el avance de la mercantilización de la sanidad, que se manifiesta en un creciente desvío de servicios y diagnósticos hacia la sanidad privada. Según sus palabras, esta privatización progresiva “parasita el sistema público y acelera su deterioro”.

Uno de los puntos críticos mencionados fue la proliferación de facultades privadas de Medicina, a las que se accede por capacidad económica y no por méritos académicos. “Esto debilita el carácter público de nuestro sistema”, subrayó la Coordinadora.

Asimismo, se puso en valor el papel de los profesionales sanitarios, que “sostienen a duras penas el sistema público”, y se recalcó que, sin un modelo fuerte y bien financiado, las zonas rurales quedarán cada vez más desprotegidas. “La sociedad rural es muy consciente de que sin sanidad pública, sus posibilidades de atención digna se esfuman”, insistieron.

Desde la Plataforma se hizo un llamamiento a la unión de todas las zonas básicas de salud en defensa del bien común: “Un sistema público reforzado, con profesionales sanitarios bien tratados y condiciones laborales dignas”.

El mensaje final de la manifestación fue directo: se pidió la dimisión del consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, al que acusaron de una gestión “nefasta” y de una “continua venta de humo” ante los problemas estructurales del sistema.