El escritor Alberto Olmos decía en un artículo que "en efecto, hay unicornios, galaxias lejanas y gente honrada". Pues sí, aún existen personas honestas que no se aprovechan de lo ajeno.
Es el caso de una persona que acudió al cajero automático de la Plaza de la Constitución, frente a la Subdelegación del Gobierno, a sacar dinero y se encontró con una tarjeta de crédito olvidada por el anterior usuario.
Este honrado ciudadano se encontró con la tarjeta y la recogió, pero antes de decidió dejar una nota para avisar al olvidadizo propietario de la tarjeta bancaria: "Jorge, tu tarjeta está en la Comisaría". Y firma con las iniciales P.M. Un gesto muy de agradecer ante el susto que suponemos se llevaría Jorge.
Aunque nos quieran convencer de lo contrario, somos bastantes honrados. Y cuánto más dinero hay en la cartera, más honrados somos, aunque parezca mentira.
Un estudio publicado en la revista científica Science revela que la mayoría de las personas que se encuentran una cartera la devuelven; y no solo eso: esa investigación concluyó que cuanto más dinero haya en esa cartera perdida, más posibilidades existen de que la persona que la encuentre la devuelva, según un artículo publicado en elconfidencial.com.
La investigación se realizó en 2019 en 40 países con 17.000 experimentos que se dividieron en tres categorías: una cartera vacía, otra con poco dinero y una tercera con una cantidad más importante. La media en los países desarrollados era de 12 euros en las carteras con poco dinero y 80 euros en las que tenían una cantidad mayor. Y siempre había tarjetas para poder contactar con su dueño.
Aunque los expertos esperaban otros resultados, la conclusión fue sorprendente: las carteras vacías fueron devueltas solo por el 40 por ciento de las personas; las que guardaban poco dinero fueron devueltas por el 51 por ciento de las personas, más de la mitad; y las que contenían la mayor cantidad de dinero, fueron devueltas por más del 72 por ciento de las personas, es decir, siete de cada diez.
