Un mes antes de la llegada de la Navidad, asociaciones minoritarias de transportistas convocan paros indefinidos para denunciar la precaria situación del sector. La convocatoria, como en marzo, parte de la Plataforma en Defensa del Transporte, que aglutina a autónomos y pequeñas empresas.
En aquellos 20 días de paros, la huelga provocó problemas de abastecimiento en supermercados y grandes superficies. Apenas 7 meses después de la desconvocatoria, los pequeños transportistas vuelven a reivindicar mejoras y, sobre todo, que se haga cumplir la Ley que impide trabajar a pérdidas.
Según los convocantes de la huelga se están haciendo "trampas" y no se cumple la normativa. Por ello, piden al Gobierno que controle que se cumple la norma que obliga a los cargadores para los que trabajan a pagar, al menos, lo que les cuesta el servicio. Y denuncian que la situación es peor que en marzo.
Ante este panorama un 86% de los autónomos y pymes que acudieron a la última asamblea de la plataforma decidieron votar a favor de una huelga de la que se desmarcan las patronales del sector.
Mientras, la ministra de Transporte, Raquel Sánchez, pide "responsabilidad" a los convocantes y señala que el Gobierno está cumpliendo "compromisos", al tiempo que anuncia un plan de inspección del Transporte. También reclama a los transportistas que denuncien los "incumplimientos" de los que se quejan y recalca que "no nos podemos permitir" que haya nuevos paros.
Mientras, las patronales del sector se desmarcan de los paros. La Confederación Española de Transporte de Mercancías así lo ha hecho público y en Zamora, el presidente el presidente de la Asociación Zamorana del Transporte, Pedro Rodríguez, deja claro que "no queremos parar".
hemos logrado cambios importantes en materia legislativa que facilitan a las empresas y autónomos el desarrollo de su actividad.
Las patronales recuerdan que con los acuerdos alcanzados con el Ministerio de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana se han logrado cambios importantes: la prohibición de la realización de las labores de carga y/o descarga por parte del conductor, la obligatoriedad de la cláusula de revisión del precio del transporte por la variación del precio del combustible, la reducción de los tiempos de espera, la devolución mensual del gasóleo profesional, la rebaja de 20 céntimos/litro de combustible, las ayudas directas (dos pagos de 1.250 € por vehículo pesado y 500 € por ligero) o la Ley de la Cadena de Transporte, entre otras.
"Por supuesto, aún queda mucho por hacer", reconocen, pero también consideran que los acuerdos logrados son "as herramientas que tienen que utilizar los transportistas para evitar abusos por parte de los cargadores y cobrar un precio justo por sus servicios".
