La Feria de Bienvenida 2021 que se celebra esta tarde en el Campus de Zamora y que se prolongará durante cuatro horas hasta las 16:00 de la tarde viene a demostrar la fuerza y el potencial de una oferta universitaria cada vez más afianzada, valorada y reconocida.
Así lo ha constatado Jesús Ángel Delgado que ha celebrado que esta feria sirva a la vez para recibir a los estudiantes de este campus que este año podrá ser “plenamente presencial” -a la espera de que se formalice en toda la Universidad de Salamanca- y con el asesoramiento profesional de expertos que aseguran que “una comunidad universitaria completamente vacunada con la pauta completa permite el desarrollo de una actividad académica, con la prudencia habitual, pero en formato de presencialidad total”.
Todo en un año en el que se consolidan varios de los grados que actualmente se localizan en el Campus de Zamora como es la nueva especialidad de Aplicaciones 3D Interactivas y Videojuegos, pero también de ingenierías como el de Ingeniería Agroalimentaria que ha aumentado el nuevo alumnado en cerca de un 43% al pasado de los 16 alumnos a 28 estudiantes de nuevo ingreso, abandonando así las bajas tasas de años anteriores.
Delgado ha destacado el incremento del número de estudiantes de manera generalizada en el resto de áreas técnicas, mientras que los grados de Enfermería, Relaciones Laborales y Magisterio también se mantienen en buenas cifras. A falta de conocer las cifras finales -ya que aún se están completando las matriculaciones en ciertas áreas-, las estimaciones apuntan a que este año se podrían alcanzar los 1.500 alumnos frente a los 1.400 de cursos pasados, lo que rompe con una tendencia a la baja en el número de nuevas matrículas formalizadas en el Campus, lo que asegura el nuevo interés y el futuro del mismo.
Un interés fortalecido además por el reconocimiento de la Universidad de Salamanca entre las 500 mejores posicionadas del mundo y, en concreto, el grado de Ingeniería Agroalimentaria que se oferta en este campus, lo que permite a la USAL incorporarse al reducido número de universidades que pueden recibir becarios internacionales de muchos países que condicionan la concesión de esas becas a esa posición. A ello se suma la gran labor investigadora que se desarrolla y que está entre los más citados a nivel mundial.
