viernes. 19.04.2024
El Síndrome postCovid incapacita para trabajar de forma temporal
El Síndrome postCovid incapacita para trabajar de forma temporal

La definición y validez de este síndrome aún no son claras, numerosos estudios reportan que los individuos recuperados de la COVID-19 pueden tener persistencia de numerosos síntomas, anormalidades radiológicas y compromiso en la función respiratoria incluso durante varios meses2. Incluso se podría abordar como una patología emergente.

A falta de definición expresa, se entiende por Síndrome Post COVID:  la persistencia de síntomas 12 semanas (3 meses) después de superada la fase aguda del COVID-19.

De esta manera diferenciaríamos el COVID post-agudo (síntomas más allá de las 3 semanas) o el COVID prolongado (síntomas entre las 3-6 semanas) y el Síndrome Post COVID o COVID crónico (más de 12 semanas).

Qué no es Síndrome Post COVID

Aunque pudiera ser más una mera cuestión semántica, más que nosológica, si definimos el SPC como los síntomas de COVID-persistentes más allá de lo esperado y la afección respiratoria consecuente: Pareciera no debieran incluirse como SPC los síntomas de las secuelas derivadas de las complicaciones graves por afectación de diversos órganos tras la infección o la comorbilidad por otras patologías concurrentes o intercurrentes con el propio proceso o las enfermedades previas agravadas por la infección.

La OMS (12 octubre 2020) advertía que muchos pacientes infectados con el COVID-19, ya sea de forma leve o grave, meses después aún presentan síntomas como fatiga, dolor y dificultades para respirar, conocido como el “COVID prolongado”, y en diciembre 2020 María Van Kerkhove, durante la conferencia bisemanal de la OMS señalaba que La COVID-19 persistente, cuenta ahora con un código en la Clasificación Internacional de Enfermedades designado como “Síndrome Post COVID”.

Por lo que debiera de utilizarse esta denominación “Síndrome Post COVID” (SPC).

¿Qué síntomas recoge el Síndrome Post COVID?

Los más destacados: Fatiga (bajo umbral de resistencia al ejercicio), astenia (cansancio en reposo), disnea (falta de aire) y la tos.

Sin embargo, diversos autores los elevan a más de 50 (Sandra López León, Sonia Villapol, Talia Wegman-Ostrosky  et al. Revisión sistemática y metanálisis 2021)6 o la encuesta de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG 2020).

Así recogeríamos: Fatiga. Astenia. Disnea. Tos. Dolor de cabeza. Anosmia, ageusia. Dificultades de atención y concentración. Dolor en el pecho. Dolor de garganta. Insomnio. Dolores musculares. Dolores articulares. Bajo estado de ánimo. Ansiedad. Palpitaciones. Mareos. Parestesias. Pérdida de cabello. Sudoración. Febrícula.

Resultando la siguiente afectación orgánica, según la citada encuesta SEMG (Sociedad Española de Medicina General). Síntomas generales (95%). Alteraciones neurológicas (86%). Problemas psicológicos/emocionales (86%). Problemas del aparato locomotor (82%). Problemas respiratorios (79%). Alteraciones digestivas (70%). Alteraciones cardiovasculares (69%). Alteraciones otorrinolaringológicas (65%). Alteraciones oftalmológicas (56%). Alteraciones dermatológicas (56%). Alteraciones de la coagulación (38%). Alteraciones nefrourológicas (25%).

El SARS-CoV-2 además del daño a los pulmones, puede afectar al corazón, los riñones, el intestino, el sistema vascular e incluso el cerebro. Teniendo en cuenta que durante el proceso fisiopatológico se genera una intensa respuesta inflamatoria afectando en primer lugar al tracto respiratorio y posteriormente al sistema cardiovascular, nervioso central y periférico, músculo esquelético, además de los efectos psiquiátricos y psicológicos que puede desencadenar.

Los efectos neuropsiquiátricos del COVID son evidentes21 pudiendo presentar ansiedad, depresión, niebla mental (desorientación, confusión y dificultad para concentrarse).

¿A qué pacientes afecta?

Normalmente las personas se recuperan de la COVID-19 después de 2 a 6 semanas. Pero en algunas personas, algunos síntomas pueden persistir o volver a aparecer por semanas o meses luego de la recuperación inicial. Esto puede ocurrirles también a personas con una enfermedad leve.

Las personas no contagian a los demás durante este tiempo. Otros pacientes desarrollan complicaciones médicas que pueden traer problemas de salud duraderos. La COVID-19 puede dar lugar a una enfermedad prolongada y síntomas persistentes, incluso en los jóvenes adultos y personas con pocas o sin condiciones médicas crónicas subyacentes y que no fueron hospitalizados (OMS actualización 36 de 2020).

El SPC puede presentarse tanto en casos graves de la enfermedad, como en los casos más leves y afectar también a personas jóvenes2.

En un principio todos los estudios abordaban al paciente hospitalizado, hasta que se comprobó también afectaba a los casos tratados a domicilio.

En cuanto a los pacientes hospitalizados es importante aclarar que quizás muchos de estos, también pueden estar sufriendo síndrome pos-cuidados intensivos Síndrome Post UCI (PICS Post‐intensive care syndrome), un grupo de síntomas que en ocasiones presentan quienes estuvieron en una unidad de cuidados intensivos.

Dichos síntomas incluyen debilidad muscular, problemas de equilibrio, deterioro cognitivo y trastornos de la salud mental, y se observan después del alta de la unidad de cuidados intensivos, que habitualmente implica un período prolongado de ventilación mecánica.

 La OMS reiteradamente ha hecho hincapié en que el Síndrome Post COVID afecta no sólo a los pacientes hospitalizados, o pacientes ancianos, sino que afecta a pacientes con COVID Leve (no hospitalizados) y a pacientes jóvenes. Así mismo la OMS recoge en su 36ª actualización lo que sabemos sobre los efectos a largo plazo de la COVID-19.

El «síndrome post-COVID-19» y su plurisintomatología se presenta tanto en pacientes que requirieron hospitalización como los que no, persistiendo estos síntomas tres después, no destacándose el subgrupo de pacientes con COVID-19 «leve» o «grave», pues precisamente pacientes con COVID-19 «leve» queda evidenciado que no todos se recuperan completamente alrededor de 3 meses después de la aparición de los síntomas. 

 En cuanto a cuántos afecta el Síndrome Post COVID, parece afectaría al 80% de los pacientes hospitalizados y entre el 10% y el 30% de los pacientes no hospitalizados o atención ambulatoria, dependiendo de la franja de edad.

Los pacientes con enfermedad coronavirus sin complicaciones 2019 (COVID-19) tienen síntomas persistentes a largo plazo y deterioro funcional similar a los pacientes con COVID-19 grave20.

¿Qué causa el Síndrome Post Covid?

Se van conociendo los mecanismos de las complicaciones del SARS-CoV-2, y la cascada de diseminación y órganos que pueden verse afectados, así como la “tormenta” de citoquinas y el síndrome de linfohistiocitosis hemofagocítica, como causantes de estas complicaciones.

El desencadenante del daño, y todas estas secuelas parecen estar causadas por tanto por respuestas inflamatorias graves, microangiopatía trombótica, tromboembolia venosa y falta de oxígeno.

Se necesita más tiempo e investigación para comprender los efectos a largo plazo de la COVID-19, por qué persisten o vuelven a aparecer síntomas, cómo y a quienes afecta y la evolución clínica y la probabilidad de una recuperación completa. Así mismo conocer la patología previa de estos pacientes, y otros factores que puedan incidir en la aparición del Síndrome Post-COVID15.

Fuente: prevencionar.com

¿Qué es el Síndrome Post COVID?