El Barandales es un personaje que desempeña la misión de avisar al público de la marcha de las procesiones de Semana Santa de Zamora. Un símbolo que caracteriza la Pasión en la capital. Por segundo año consecutivo, el zamorano, Roberto Rodax, acompañará a la Vera Cruz y a Luz y Vida, pero cargado emoción, Rodax desea "ser de alguna más".
Anteriormente, el Barandales lo desempeñaba una única persona. Con el fallecimiento de Alberto Villacorta en 2011, la situación cambió. Cada cofradía tiene su propio Barandales. La vestimenta es diferente, una túnica especial diseñada por cada cofradía. El traje de la Vera Cruz se caracteriza por un color morado que se diseñó en 2017 y fue donado por la familia Matellanes.
Con sus esquilas avisa de la procesión. Una tradición que nació en el siglo XVI porque las campanas de las Iglesias de Zamora enmudecían desde la tarde del Jueves Santo hasta el Domingo de Resurrección, así nació la necesidad de esta figura tan esencial y tan importante para la Semana Santa.
Representar a esta figura representativa de la Semana Santa de Zamora, conlleva mucha preparación, "he empezado en Cuaresma a prepararme cuando salgo de mi trabajo. Normalmente en la puerta del cementerio, porque allí no molestas a nadie. Ir pillando un poco el toque. No cualquiera las puede llevar".
Espera estos días tan especial para Zamora con mucha ilusión y ganas, "si no sales con ganas, es mejor que te quedes en casa. Es igual que un cargador o cualquier otra persona. Antes de ser Barandales he desempeñado otro papel en las cofradías. Es un papel muy importante para mí".
Así, ha querido agradecer su confianza a las cofradías de la Vera Cruz y Luz y Vida "por haber contado conmigo y dejarme vivir esta experiencia inolvidable". Rodax encabeza así dos de las procesiones que salen a la calle durante la Semana Santa de Zamora. Unos días que llegan de emoción las calles de la capital en las que la Pasión se vive de la mejor manera. Un acontecimiento religioso, cultural y social que cuenta con el distintivo de Fiesta de Interés Turístico Internacional.
Las esquilas del Barandales ya resuenan en las calles de Zamora. Un símbolo único y especial de la Semana Santa de Zamora, "un orgullo. Todo el mundo te señala con el dedo para bien".
