viernes. 29.03.2024

Lo definen como una reivindicación histórica y vaya si lo es si nos ceñimos al tiempo en el que se prolonga su petición: 16 años solicitando formalmente el asfaltado que permita a los vecinos de la pedanía de Monumenta -dependiente del Ayuntamiento de Luelmo de Sayago- atravesar el coche los apenas cuatro kilómetros que los separan del vecino Argañín.

Desde hace décadas, los vecinos de Monumenta -poco menos de una treintena en base a los datos del INE en 2016- y sus allegados se ven aislados ante la falta de comunicación con los municipios vecinos. Únicamente el asfaltado con Luelmo les otorga algo de visibilidad, convirtiéndose prácticamente en la única alternativa para circular con seguridad y comunicarse con el resto de la comarca. 

Son cuatro kilómetros, pero peleones. Viajar hasta Argañín se convierte en toda una odisea que obliga en la mayoría de ocasiones a sus habitantes a dar un rodeo de más de 20 kilómetros recorriendo cuatro carreteras (la ZA-L-2222, ZA-311, ZA-324 y por últimola ZA-V-2210 durante otros seis kilómetros). Un rodeo en toda regla que supone un desvío de 23 minutos si se quieren evitar los 10 minutos de traqueteo en un auténtico "camino de cabras". 

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Desde la Asociación Cultural y de Vecinos "Amigos de Monumenta", su presidente, José Luis Ordax, se afana por mantener viva esta reivindicación que parece caer en el olvido. Desde el 2006, esta Asociación, que nació tres años antes con la idea original de dar vida al pueblo, ha peleado el asfaltado con Argañín, ante la convicción de que "en las pedanías, las cosas siempre llegan un poquito más tarde que en la cabecera del municipio". 

Tanto es así que, la friolera de 16 años después y tras modificar los estatutos de la Asociación para hacer oírse en el Ayuntamiento del que dependen, siguen esperando. La conexión a través de la ZA-L-2222 no llega pese a los numerosos contactos con los Ayuntamientos de Luelmo y Argañín, así como con la Diputación de Zamora, que sí mejoró el camino gracias a una entrega de firmas organizada a través de Change.org. En todo caso, esa mejora, que consistió en un reforzamiento del firme con zahorra y tierra adicional. Un "parche" que no ha impedido que el camino se siga deteriorando, tal y como se aprecia en las imágenes. José Luis ha destacado que, con el paso del tiempo, los baches vuelven a aparecer y los aguaderos se bloquean en numerosas ocasiones, lo que deriva en que el agua asalta el camino. 

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"El tiempo va pasando y nos hacemos todos 16 años más mayores y el camino se va haciendo, especialmente durante los inviernos, especialmente duro porque la lluvia, el hielo, la nieve, etc hacen su trabajo de deterioro y el camino se estropea", lamenta José Luis. 

La finalización de la carretera ZA-L-2222 supone su principal reivindicación, pero no la única si tenemos en cuenta que Monumenta tampoco tiene acceso a Gamones, Tudera ni a Villamor siendo así la única población sayaguesa sin salida. "Es muy evidente tanto a nivel de necesidad y conveniencia" pero que "por unas cosas u otras nunca llega pese a que el coste estimado no es excesivo", precisa José Luis, convirtiéndose además en un punto más de acceso hacia los Arribes del Duero. 

Mientras tanto, desde la Asociación Cultural y de Vecinos "Amigos de Monumenta" seguirán al pie del cañón, asegurando su presencia en redes, algo vital para que no se olvide su reivindicación y sin perder la esperanza en ningún momento, pese a que la espera cada vez se haga más cuesta arriba. 

16 años de espera para cuatro kilómetros de asfaltado