El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado la prórroga de la reducción del IVA del 21% al 10% así como la suspensión del 7% a la generación eléctrica hasta final de año con el objetivo de abaratar el recibo final de la luz, lo que contribuirá a paliar los máximos históricos que han encarecido el precio medio que tienen que abonar los en torno a 10 millones de hogares españoles acogidos al mercado mayorista 'pool'.
Asimismo, Sánchez ha confirmado que estas medidas se complementarán con un descenso del impuesto especial a la energía eléctrica del 5,1% al 0,5%. Unas medidas que supondrán una pérdida de recaudación para el Estado de 1.400 millones de euros este año. Durante una entrevista concedida a TVE, Sánchez ha pedido distinguir entre la evolución la evolución del precio de la energía en los mercados internacionales -en la que ha recordado que ningún Gobierno tiene capacidad de actuación- y otra es cómo actuar en el recibo de la luz. En este punto, el Gobierno apuesta por varios ejes: la apuesta por las energías renovables, la protección a los consumidores más vulnerables (precisamente este lunes el Congreso ha aprobado la prórroga del escudo social hasta el 31 de octubre) y reducir algunos impuestos.
Sánchez ha adelantado que el Consejo de Ministros de hoy martes prorrogará hasta finales de años la suspensión del 7% a la generación eléctrica así como la rebaja del impuesto especial al 0,5%, "que es lo mínimo que exige la legislación comunitaria". De esta manera, ha reafirmado su compromiso de lograr que los españoles paguen por el recibo de la luz lo mismo que en el año 2018 tras un verano de continas escaladas en el precio de la misma y que ha dejado facturas históricas según alertan las organizaciones de consumidores.
En cuanto al salario mínimo, Sánchez también ha ratificado la intención de su Ejecutivo de subirlo "cuanto antes" pese a no recibir finalmente el visto bueno de la patronal. Unas palabras que llegaban horas después de que la ministra de Trabajo y vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, dejara la pelota sobre el tejado de los socialistas tras mostrar su apuesta por cerrar esa subida únicamente con el acuerdo de los sindicatos.
