jueves. 25.04.2024
Sara García muestra su casco
Sara García muestra su casco dedicado a la protectora Scooby

Los 45 perros que acoge la protectora Scooby en el Polígono de los Llanos recibieron hoy la visita de Sara García tras su paso por una Dakar muy especial para ella. La carrera comenzó con su positivo y una lesión de brazo y acabó con un anillo de matrimonio. Y con ella, siempre su casco, que dedica a causas solidarias".

La piloto zamorana lució durante este Dakar un casco dedicado a la protectora, que lleva 30 años dando "casa" a animales abandonados y maltratados. Y hoy, Sara García quiso visibilizar esa labor acercándose al santuario de Scooby para posar con él y "jugar" con algunos de los 45 perros que se cobijan en las instalaciones del Polígono de los Llanos.

Allí, en un breve encuentro con la prensa, la piloto zamorana y su pareja Javier Vega, hablaron del Dakar 2022, la infección por coronavirus, la lesión del brazo de Sara y hasta de la pedida de mano en la última etapa.

Reconoció la zamorana que este Dakar ha sido "diferente" a otros e incluso más "light" porque "aunque ha habido más navegación, ha sido mucho más rápida". De hecho, cree que hasta la etapa 11 "no ha habido un verdadero recorrido de Dakar", pero "a mí me vino muy bien porque el primer día me hice daño en el brazo y me costó seguir". 

Sara García Scooby

A pesar de los "dolores", Sara García destacó que su equipo logró lo más importante: volver a traer una medalla y un tercer puesto en la categoría femenina. "Objetivo cumplido después del positivo y de esa primera etapa", recalca con una sonrisa.

Asegura que el Dakar "siempre guarda problemas" al ser una prueba tan larga y tan dura, por eso cree que "el punto clave de la carrera es ir gestionando todo lo que va pasando". Confiesa que tras la lesión del brazo dejó de "mirar la clasificación" y que su principal objetivo comenzó a ser "lograr la medalla de finisher".

Su valoración es positiva en un Dakar que le deparó una gran sorpresa: la pedida de mano de su pareja Javier Vega, abriéndose el mono para coger algo de un bolsillo interior y sacar un anillo en una imagen que dio la vuelta al mundo. "No hay fecha de boda", señala. "Cuando acabe de poner las lavadoras con la ropa del Dakar hablaremos de la boda", bromea.

Para 2023, la piloto zamorana apunta que "no hay ningún proyecto sobre la mesa", aunque adelanta que le gustaría probar en camiones, como mi padre. "Todavía el papel está en blanco", zanja.

Sara García: "Para el Dakar 2023 a lo mejor me animo con los camiones"